Familias en riesgo de exclusión social afectadas por procesos de desahucios contarán con el apoyo de la Generalitat para afrontar el gasto de suministros básicos (luz, agua y gas), gracias a un nuevo plan de apoyo que avanzó ayer el jefe del Consell, Ximo Puig. El anuncio llega un día después de lograr parar el desahucio de una familia de la ciudad de Castellón para la que ahora se persigue una moratoria, y en el marco de la primera reunión, ya prevista, de la Mesa de Prevención contra los Desahucios, en Valencia.

Para consolidar este plan, desde la Conselleria de Vivienda, a cargo de María José Salvador, también participante en la cita, ya se han desarrollado contactos con las empresas suministradoras de los servicios y se trabajará en otras medidas de choque.

PROMOCIÓN DEL ALQUILER // Otra novedad, según manifestó Puig, es que en menos de un año se aprobará la ley de función social de la vivienda en Les Corts, para crear “una red de seguridad para los ciudadanos”. Uno de los ejes será promocionar el alquiler frente a la compra, “que implica una realidad económica que para mucha gente no es posible”.

El president subrayó el compromiso de la Generalitat con “el drama de los desahucios” y afirmó que garantizar la vivienda “es un derecho constitucional que hay que llevar del papel a los hechos de una manera sostenible económicamente”. Su meta es que “ninguna familia en la Comunitat esté sin posibilidad de tener una vivienda digna” y dijo que, con diálogo, se han parado “más de 150 desahucios”. De la mesa de prevención cabe destacar que reúne juntos, por primera vez, a instituciones, bancos, sindicatos y plataformas sociales. H