El sector pesquero de Castellón ciudad ha recibido «una alegría» estos días con la captura de más de 12.600 kilos de doradas desde el lunes hasta ayer. Así lo califica el patrón mayor de la cofradía de pescadores Sant Pere, del Grao, Manuel Peña, quien, no obstante, destaca: «Una flor no hace mayo y esto no consigue que desaparezcan nuestros problemas».
Y es que desde el verano, el subsector del arrastre provincial atraviesa una crisis más aguda de lo habitual, con un descenso del precio del pescado que en varias semanas ha estado un tercio por debajo de lo habitual en años anteriores, como han denunciado desde la propia Asociación de Armadores de Castellón.
«ALEGRÍA» // En este contexto, la captura de las doradas (repartida entre los 3.000 kilos del lunes, los 6.400 del martes y los 3.200 de ayer, cuando por el mal tiempo solo salieron a faenar cinco barcas de las 13 de la flota de arrastre) ha dado «una alegría a los marineros en estos días de frío, porque es un pescado que se paga a buen precio y es agradable para trabajar», destaca Peña.
Para los ejemplares más grandes, que pueden alcanzar los cinco o seis kilos, el precio en lonja ronda «los 11 euros el kilo», apunta a este diario Manuel Peña. Y este va en descenso, hasta situarse en torno a unos siete u ocho euros el kilo «conforme se acerca al tamaño de las doradas de piscifactoria, a pesar de que no tiene nada que ver el sabor de unas y otras», se lamenta el representante de los marineros del Grao.
La captura de este pescado se suele producir todos los años por estas fechas. Y es que, aunque pasa la mayor parte de su vida en aguas poco profundas, donde las barcas de arrastre no pueden faenar, en estas fechas va a aguas de mayor calado para aparearse y poner sus huevos, formando bancos, lo que aprovechan los navíos pesqueros provinciales para conseguir capturarlas. Además, el mal tiempo facilita su pesca.
Por el momento, las capturas se limitan a la zona de la Plana, mientras los tres puertos del Maestrat no han tenido la suerte de dar con este pescado.
