El Consejo de Gobierno extraordinario ha ratificado este viernes los despidos de los 17 trabajadores del Hospital Provincial, acordados el pasado 25 de octubre. La Diputación se ha opuesto en la votación y la Conselleria ha 'tirado' del voto de calidad de la consellera de Sanidad, Carmen Montón, para sacarlo adelante. Entre los votos favorables, se encuentra también el de la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco.

Además, se ha dado luz verde, por unanimidad, a impulsar una investigación interna para aclarar e investigar "la facturación irregular detectada en el centro durante los años 2003 y 2015", tal y como ha señalado el Provincial en un comunicado.

El presidente de la Diputación, Javier Moliner, ha lamentado que “la Generalitat haya ratificado el despido de los trabajadores, pese a demostrar la Justicia que la consellera Montón se basó en una sarta de mentiras para justificarlos”.Moliner ha asegurado que “es un error monumental de Montón que solo se puede explicar desde la obcecación en persistir y profundizar en un error cometido hace unos meses". En este sentido, ha incidido en que la Justicia "les ha dicho que no tenían razón, que los contratos eran legales y lo que eran ilegales eran los despidos y que al final todo eso acaba conduciendo a un escenario en el que cada día los servicios que se pueden prestar a los pacientes son peores porque con menos profesionales se prestan menos servicios”.

La celebración del consejo ha estado precedida de la protesta de trabajadores que, convocada por la sección sindical de CCOO, han reclamado a la consellera la readmisión de estos 17 trabajadores, a ocho de los cuales ya la justicia les ha dado la razón al declarar sus despidos improcedentes o nulo.

Oncólogos, en guardia

Además, la reunión del órgano directivo se ha celebrado apenas 24 horas después de la protesta que, por escrito, ha formulado el servicio de Oncología Médica del centro, quien se manifiesta totalmente contrario a los cambios que la dirección del centro quiere implantar en cuanto a las guardias. Para los especialistas en el tratamiento de cáncer, la propuesta contraviene la normativa legal y, con ella, se corre el riesgo de que «este centro de referencia en esta especialidad pierda buena parte de su calidad asistencial hacia el paciente», según fuentes médicas.

En este sentido, los oncólogos manifiestan su rechazo a esta modificación de las guardias si no viene acompañada por un refuerzo sustancial de la plantilla del centro que permita asumir este servicio con garantías.