Los agentes de la Policía Local de Castellón serán los encargados de hacer cumplir a partir de esta noche la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que prohíbe la venta de alcohol en las calles de las tascas --Barracas e Isaac Peral-- a partir de las 22.00 horas.

Para ello, el cuerpo de seguridad municipal ha elaborado una instrucción -a modo de protocolo- que marca las pautas a seguir para aplicar el fallo judicial. La finalidad es «hacer cumplir la sentencia firme, como no puede ser de otra forma, porque no hacerlo sería un delito por parte del Ayuntamiento de Castellón, pero se tiene que hacer de la manera más respetuosa posible», explicó la portavoz del equipo de gobierno, Verònica Ruiz. «La policía hará su trabajo de la mejor forma posible, pero la pretensión no es multar, sino que se cumpla la sentencia», puntualizó la edila.

Los agentes, a partir de las 22.00 horas, informarán y recordarán a quienes vendan alcohol en estas calles, si se da el caso, de la prohibición de poder hacerlo y la sanción por el incumplimiento de esta obligación recaerá exclusivamente en los titulares de los establecimientos que permitan la venta de alcohol para su consumo en vía pública más allá de las 22.00 horas, según matizan fuentes municipales.

La realidad es que, dadas las características de las calles de las tascas --estrechas-- y el elevado número de personas que se reúnen, se aventura complejo hacer cumplir la nueva sentencia.

EXCEPCIONES // La sentencia del TSJCV contempla excepciones, ya que las tascas podrán continuar vendiendo alcohol en el interior de los locales hasta las 23.00 horas y se podrá consumir dentro, en los veladores y terrazas.