El pleno del Consell estudia aprobar el viernes la comisión interdepartamental de la Agencia Valenciana contra la Despoblación (Avant), que incidirá en la movilidad, educación, sanidad, trabajo y fiscalidad para frenar este problema que genera desigualdad y sufren «gravemente» 72 municipios valencianos. En concreto, 38 son de Castellón, que es la provincia de la Comunitat más afectada por este problema, como viene informando Mediterráneo.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, expuso ayer esta propuesta y anunció que encargarán a las universidades valencianas un diagnóstico y medidas contra este fenómeno, que será también abordado en un gran congreso, que se celebrará el primer trimestre del 2018 con ayuntamientos, universidades, sociedad civil y diversos expertos europeos.
Puig indicó que, como representante en el Comité de las Regiones, planteará renovar a partir del 2020 los compromisos económicos de la UE, «porque todas las instituciones europeas coinciden en que hay que situar más inversión en el ámbito de la lucha contra la despoblación».
fondos europeos // Además, avanzó que antes de un mes se publicará la orden del segundo Fondo de Cooperación Local, con un importe de 20 millones de euros cofinanciado al 50% con ayuntamientos y dirigido a proyectos de 100.000 euros o más, de municipios de menos de 20.000 habitantes y que versen sobre patrimonio cultural, patrimonio turístico, tecnologías de la información y la comunicación o agua.
El jefe del Consell explicó que la despoblación «parece ajena» a la Comunitat, «pero la realidad es que en el 80% del territorio vive el 20% de la población» y todos los indicadores reflejan que hay 72 pueblos de la Comunitat Valenciana abocados a la «muerte» y en «gravísimo riesgo de desaparición». En este sentido, Puig apuntó que, además de los desequilibrios de la sociedad, hay otros «territoriales que afectan a la calidad de vida de las personas y generan desigualdad».
