El Institut Valencià de Cultura (IVC), ente dependiente de la Conselleria y gestor de los principales espacios escénicos de Castellón capital, como son el Teatro Principal y el Auditori, estudia rebajar precios para recuperar el pulso a los conciertos en Castellón y que la ciudad regrese al mapa de las grandes giras nacionales.

El director del IVC, Abel Guarinos, explicó ayer a Mediterráneo, que ya se reunió con los promotores, pero que se reunirá de nuevo «para hablar de propuestas concretas», y se revisarán las condiciones de contratación de los espacios, rebajando el porcentaje de taquilla --que es del 20% para el IVC habitualmente--, «modificando el alquiler de la sala a un mínimo», o «cobrar por medio día de uso y no el día completo», para que «sea más rentable para el promotor y para que el IVC, que trabaja con dinero público, no pierda, pues hay que pagar unos mínimos de abrir el espacio, como personal, luz o seguridad».

«Todo se estudiará atendiendo al valor cultural de cada propuesta, si son o no adecuadas a los espacios institucionales», matizó.

Guarinos recoge así el guante lanzado ayer por la concejala de Cultura, Verònica Ruiz, que tras decir que el Ayuntamiento no dispone ni de un gran presupuesto para Cultura ni espacios con grandes aforos, tendió la mano a los promotores y les dijo que les acompañaría en el diálogo con el IVC para conseguir un mayor apoyo institucional para que la cultura crezca en la ciudad.

Y es que los promotores musicales de Castellón han lanzado esta semana una dura crítica ante la exclusión de la ciudad de los grandes circuitos, a consecuencia «de una falta de criterio que afecta gravemente a las empresas locales, haciendo que apuesten por otras ciudades; así como la falta de ayudas a la industria y la nula inversión en proyectos que los promotores tienen previstos para el 2017», según un comunicado firmado por las principales empresas musicales provinciales.

«HAY DIFERENTES FÓRMULAS» // El director del Instituto Valenciano de Cultura especificó que «hay muchas fórmulas posibles», que ya se explicaron a los empresarios, para que «la Administración, que somos todos los valencianos, no gane, sino que salve gastos y no pierda para ampliar el margen de beneficio de una empresa privada», señala Guarinos. «Todo dependerá del valor cultural que tenga el concierto, la obra teatral o el espectáculo. Vamos a apoyarles para que Castellón y la cultura sumen», apostilló.