El IV Congreso Magdalenero se abre «a toda la ciudadanía». Cualquier vecino, «a título individual o colectivo», podrá presentar su propuesta para mejorar, renovar y promocionar las fiestas de la Magdalena en una cita que se celebrará «tras el verano», aunque aún no tiene fecha concreta.
Así lo decidió el comité científico, que ha diseñado «una estructura de congreso orientada a la participación activa de la ciudadanía», según fuentes municipales, que ponen el acento en que los vecinos podrán aportar sus ideas por escrito, como comunicaciones, para que las diferentes mesas que estudiarán las incorporen a sus ponencias en cada una de las cuatro áreas en las que se ha dictaminado dividir el foro.
La cita dará, además, la posibilidad a los congresistas de que presenten y defiendan públicamente sus enmiendas a las ponencias, o eleven al foro alternativas y enmiendas a la totalidad.
Abordar la estructura organizativa y de gestión de las fiestas fundacionales, los entes festeros y la financiación de la semana grande constituirá el primer bloque, con una segunda área temática que versará sobre la identidad colectiva, las tradiciones, los símbolos y las representaciones oficiales. La programación, los actos, los espacios urbanos y la participación ciudadana protagonizarán el tercer bloque, mientras que el cuarto tratará sobre la construcción de la imagen de la ciudad a través de las fiestas y su proyección exterior.
FIESTAS Y CIUDAD //
Son los bloques temáticos demandados por los colectivos para que el debate sobre las fiestas se amplie a todos los campos y a todas las personas, según público el diario Mediterráneo, con la renovación de la semana grande de Castellón (el actual modelo data de 1945, «y la sociedad castellonense ha cambiado»), adaptándolo al siglo XXI, y con la internacionalización y la proyección económica y social como banderas, según fuentes del comité científico, que volverá a reunirse el próximo lunes, en un ritmo de trabajo encarado a «agilizar la convocatoria» y «poner en marcha el congreso».
OBJETIVOS //
La cita, convocada por la alcaldesa, Amparo Marco, en marzo, tiene como objetivos «armonizar las fiestas con los principios, normas y expectativas del Castellón actual, generar una mayor conciencia del valor de las fiestas para proyectar la imagen de la ciudad y evitar que sirva de instrumento político». Una circunstancia que esta semana se ha repetido, tras el rifirrafe del PSPV y el PP por las nueve dimisiones en la Junta de Festes. //
