Peatones y ciclistas que peródicamente utilizan las rondas de circunvalación de Castellón instan a reducir la velocidad en las vías como medida de prevención para disminuir la accidentalidad o, como mínimo, paliar las consecuencias de la larga lista de siniestros que acumula la ronda Este, que es una de las más transitadas de Castellón. Lo hacen después de los últimos sucesos ocurridos el pasado lunes, que se han saldado con un ciclista herido y con un peatón fallecido.

Pulsada la opinión de algunos usuarios de la ronda Este, coincidían en que una posible solución sería aminorar la velocidad (ahora se puede circular a 80 km/h), al tiempo que colocar más bandas sonoras para obligar a los vehículos a reducir la marcha.

David Aguilar, en representación del colectivo Castelló en Bici, detalló que su reivindicación pasa por «pacificiar el tránsito en la ciudad y que la velocidad máxima de circulación, en todo el término municipal, sea de 30 km/h; y de 20 km/h en zonas de influencia de parques y colegios». «La velocidad mata y, según estudios a los que hemos tenido acceso, a 30 km/h se reduce el riesgo de muerte en un 90%». «Se tiene que dar preferencia a los peatones y a las bicicletas frente a los vehículos a motor, y las soluciones se tienen que poner en marcha de forma inmediata», insistió como portavoz de Castelló en Bici.

CAMPAÑA DE PREVENCIÓN

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Castellón aseguran que «las rondas son vías rápidas de circulación» y, tras los últimos sucesos, apelan «a la necesidad de extremar las precauciones y respetar las normas de tráfico para avanzar hacia una movilidad más segura para todos los usuarios, mejorar la seguridad vial en el entorno urbano y garantizar la convivencia entre los diferentes modos de transporte».

Además, desde el consistorio recuerdan que se está aplicando desde mayo un plan de prevención de accidentes en peatones y vehículos de dos ruedas por ser los más vulnerables de la pirámide de movilidad. Entre las medidas que se han realizado y se continuarán impulsando a lo largo de los próximos meses destaca la planificación de controles policiales de velocidad, de prevención de la conducción bajo los efectos de la droga o el control de la seguridad de los vehículos a través de la superación de la ITV. Pero también se incorporará, por primera vez en Castellón, controles policiales para vigilar que se respetan pasos de peatones.