Plurilingüismo. Una palabra que la comunidad educativa ha tenido que escuchar mucho en el último año ya, desde que el 20 de septiembre del 2016 se presentara el primer borrador del decreto trilingüe, que entró en vigor el 7 de febrero. Este plan plurilingüe dinámico, que se implantaría hasta el 2024, marcaba tres niveles y una fórmula de a más valenciano, más inglés, que, en Castellón, cuaja desde el minuto cero. Un año después, a la norma se ha instalado en los juzgados, sobre todo en la castellanohablante Alicante y de manos de la oposición política y la escuela concertada, principalmente.

Tras hasta 13 recursos, el Tribunal Superior de Justicia lo mantiene suspendido cautelarmente porque «discrimina a los alumnos que optan por el castellano». Con el conflicto plurilingüe ocupando aulas y despachos y el curso a las puertas sin resolución, el 1 de septiembre, el conseller, Vicent Marzà, propone un decreto-ley de urgencia, mientras se trabaja en un segundo plan plurilingüe, con rango de ley autonómica, revisado y rebajado en sus planteamientos, que desvincula el inglés y el valenciano y elimina las certificaciones de idiomas, principales puntos de fricción judicial, cara al 2018/19.

Un decreto inicial con ‘amás valenciano, más inglés’

El decreto de plurilingüismo ha sido una de las medidas estrella del Consell. El conseller, Vicent Marzà, activó tres niveles, Avanzado, Medio y Básico, apostando por el valencià vinculado al inglés, para «corregir los desequilibrios de competencia y uso del valenciano y la falta de dominio efectivo del inglés». En Castellón, cuaja entre las familias y los directores. Una media del 80% de los centros de la provincia opta entonces, a través del consejo escolar, por ser avanzado. Casi de inmediato, surgen las primeras tensiones, sobre todo en Alicante, mayoría castellanohablante, donde la Diputación, del PP, y la Asociación en Defensa del Castellano lo recurren ante el TSJ por «discriminatoria». El tribunal les da la razón, decisión que paraliza el plan en toda la Comunitat.

Suspensión cautelar del TSJy 10 recursos aún activos

El TSJ, a finales de julio, suspende cautelarmente el decreto, cuando los centros ya han reformulado su horario y adaptado su currículo -también nuevo-- al plan dinámico. Ya no podrá ponerse en marcha, lo que causa cierta incertidumbre entre los padres y caos en los directores, que deben replantear el programa. El plurilingüismo llega a tener hasta 13 recursos, 10 de ellos aún activos al arrancar el curso 2017/18. El más corrosivo, el de la Diputación de Alicante, que lo paraliza. Se suman el PP y Vox, sindicatos como Csif, USO y Anpe, además de la Asociación en Defensa del Castellano, Covapa, Idiomas y Educación, Concapa, Fcapa y AMPA a título individual. El plan también tiene apoyos, de la Asociación de Directores de Primaria, los sindicatos Stepv, CCOO y UGT, Escola Valenciana y la Confederación Gonzalo Anaya -donde está FAPA Castelló--, mayoritariamente, todos en la escuela pública.

Un decreto-ley de urgencia ante el caos del nuevo curso

Tras dos meses de suspensión y sin respuesta del TSJ, Educación lanza un decreto-ley de urgencia que afecta a 2 y 3 años y solo a este curso para salvar la vuelta al cole, dar seguridad a las familias, y sortear las arengas judiciales. Y que vuelve al plan del PP del 2012. Y esta solo es recurrible por el Gobierno de España o por 50 diputados o senadores. Esta forma normativa corta así de raíz la posibilidad de recibir recursos de sindicatos u otros entes. De nuevo, llegan las críticas. En Castellón, esta solución deja sin efecto la promesa de la Conselleria de mantener el 80% de inglés a los colegios Sanchis Yago en la capital y al José Soriano en Vila-real, los llamados superplurilingües, que se rebelan y protestan.

Nueva proposición de leyen menos de un mes

El conseller había insistido en que «el plurilingüismo se aplicará con el instrumento que haga falta», y que "el valenciano debe ser la lengua vehículos de los colegios valencianos", y a principios de este octubre, un mes después del decreto-ley, PSPV, Compromís y Podem presentan una proposición de ley. Se llama Programa de Educación Plurilingüe e Intercultural, y «será elaborado considerando las necesidades del contexto socioeducativo y demolingüístico de cada centro». Conselleria da margen a los centros para vehicular, pero marca unos mínimos del 25% para castellano y valenciano, y una horquilla del 15 al 25% en inglés. Eso sí, la Conselleria se propone el ideal de llegar a un 50% en valenciano y un 25% en inglés. El consejo escolar decide.

Padres y directores dan el ‘OK’ al plan en Castellón

Padres y directores aluden a la «tranquilidad» que da el nuevo plurilingüismo. Eva Aparici, presidenta de la Asociación de Directores de Primaria de Castellón; y Silvia Centelles, presidenta de FAPA Castelló, piden, no obstante, que «esté listo para antes de la admisión».

Será progresivo, a aplicaren tres años hasta el 2021

Tres años es el plazo marcado para su aplicación, si arranca en el próximo curso 2018/19 sin tensión judicial. Primero, lo hará en Infantil y primer ciclo de Primaria. En el 2019/20, en segundo y tercer ciclo de Primaria y Educación Especial; y en el 2020/21, en Secundaria, Bachiller y Formación Profesional. //