Los cerca de 3.000 enfermeros colegiados en la provincia de Castellón quieren cuanto antes poder recetar medicamentos que emplean a diario en su trabajo, como un paracetamol, un nolotil, una pomada antibiótica o un antitérmico. Esta es la reivindicación del sindicato mayoritario entre los enfermeros, Satse, ahora que el Ministerio ha rubricado con estos profesionales, así como con los médicos, un acuerdo histórico para que puedan recetar.
Este pacto, que cuenta con el beneplácito del Colegio Oficial de Médicos de Castellón, permitirá modificar el real decreto de indicación, uso y autorización para la dispensación de medicamentos para eliminar el requerimiento de formación complementaria para poder prescribir.
No obstante, el presidente de la junta de gobierno del Colegio de Enfermeros de Castellón, Francisco Javier Pareja, califica la medida de «parche», ya que aboga por la modificación de otro real decreto, el del medicamento, «porque permite prescribir a médicos, dentistas, veterinarios o podólogos, pero no a profesionales de la Enfermería». «Este acuerdo no soluciona la situación, ni ofrece mayor autonomía a la profesión enfermera», indica.
Una valoración más positiva realiza el portavoz de Satse en la provincia, José María Calas, quien confía en que se contemple la reivindicación de los enfermeros de prescribir, por ejemplo, un paracetamol, un ibuprofeno o cualquier tipo de medicamento con el que trabajan de forma cotidiana. Ahora un comité fijará las medicinas a prescribir.
