Las redes sociales y las aplicaciones móviles de contactos han revolucionado el modo de relacionarse. Desde un punto de vista de la sexualidad, estas herramientas se suelen emplear para mantener contactos esporádicos y rápidos, que según los expertos favorecen las conductas de riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual.

Y es que a pesar de que los casos de VIH en la provincia de Castellón descienden, calculan que el de otras patologías, como la gonorrea y la sífilis, van en aumento. Hoy, con motivo del Día Mundial contra el Sida, se insiste en la necesidad de emplear el preservativo en las relaciones con parejas no estables.

«Estas aplicaciones crean nuevos espacios de contacto, más rápidos, la gente habla por el móvil y se cree que se conoce, se baja la guardia y luego hay sorpresas desagradables», comenta el presidente de la Asociación Ciudadana Contra el Sida de Castellón (Casda), Manuel de Gregorio.

En esta misma línea se manifiesta el decano de la dacultad de Ciencias de la Salud y coordinador del grupo de investigación Salusex-Unisexsida, Rafael Ballester. «Estas aplicaciones están muy popularizadas desde edades tempranas, con perfiles muy directos y sexualmente estimulantes», remarca, al tiempo que insiste en que los riesgos de estas apps, que cuentan con georradar, es decir, marcan la distancia y ubicación de otro usuario, son varios.

«Se producen intercambios con desconocidos, lo que supone un peligro tanto a la hora de las infecciones de transmisión sexual como por si te sucede algo. A un paciente un día se le presentaron tres en casa a la vez». Ballester remarca que este sexo a ciegas «se parece al antiguo cuarto oscuro».

UNA CITA MÁS FÁCIL

El psicólogo clínico Carlos Hidalgo explica: «Nos encontramos ante una era donde la tecnología ocupa toda nuestra vida, lo que ha contribuido a un aumento considerable de los contactos íntimos. Es mucho más fácil hoy en día, debido a las aplicaciones móviles, coquetear con personas desconocidas y conseguir primeras citas que con frecuencia terminan en una relación sexual con un desconocido». «Lo importante en este tipo de relaciones pasajeras es tener en cuenta la propia valoración de uno mismo de la situación y sus posibles consecuencias, pues con frecuencia la promiscuidad conlleva una pérdida de respeto por uno mismo, siendo incompatible con el bienestar emocional», indica Hidalgo.

Por su parte, la psicóloga y sexóloga castellonense Gemma Sánchez asegura que el factor que le lleva a una persona a usar o no preservativo en una relación es principalmente educativo, lo que evidencia «la necesidad de educar en salud afectiva y sexual y también en valores».