Es una reivindicación de la Universitat Jaume I (UJI) y una demanda social de Castellón. La facultad de Ciencias de la Salud de Riu Sec se acabará sí o sí. Lo reclama el rector, Vicent Climent, que no dará un paso más hacia la licitación de la segunda fase hasta atar la financiación, tras la garantía lanzada por el president, Ximo Puig, y el compromiso de sentarse a negociar una revisión de la aportación del Consell a las universidades «en enero» avanzada por el conseller, Vicent Marzà. Pero no solo es Salud. En el trasfondo está la infrafinanciación de la UJI con respecto a Valencia y Alicante, de «1.500 euros menos por alumno» para Castellón. La sociedad civil cierra filas entorno a la «urgencia» de acabar un edificio que completará y reunirá los estudios de Medicina, Enfermería y Psicología, y tanto alcaldes, como la Diputación, el rector honorífico, el del Consell Social, los hospitales y la comunidad educativa se han posicionado al lado de la Jaume I.
Climent urge más subvención al Consell: 13 millones extra
Vicent Climent aprovechó la última visita a las obras de la primera fase de la facultad de Medicina para urgir a la Generalitat más financiación para acometer los dos últimos módulos y terminar la que será cuarta sede del campus de Riu Sec. «Castellón corre el riesgo de quedarse solo con medio edificio de Salud o retrasarla; cualquiera de las opciones sería un fracaso, para la Universitat y para la sociedad», dijo, recordando la «situación crítica» que viven las cuentas de la Jaume I. Por ello, reclama, o bien una partida específica de 13 millones extra que vale la segunda fase, o que el Consell «se comprometa a abonar la deuda histórica más allá de los 6 millones presupuestados para el año que viene», con el horizonte del 2020, lo que suman 19 millones.
Educación primero dice «no» y después «negociará»
La respuesta de la Conselleria de Educación fue inmediata: «No habrá un plus para la UJI para terminar Medicina». Como un jarro de agua fría, la Generalitat señaló que la deuda histórica «ya se está pagando», confiando en que la universidad podrá afrontar la segunda fase con los fondos que ya recibe, que, en la práctica, son los mismos que recibía hace 10 años, en una subvención ordinaria congelada en los 64,5 millones, que no da ni para las nóminas, según el gerente, Andrés Marzal. Educación se escuda en que en el 2017 ya abonaron 18 millones para acabar la primera fase y no hay más dinero previsto en el apartado de inversiones para infraestructuras en la UJI.
No obstante, tras la presión social, el conseller, Vicent Marzà, avanzó que «la facultad de Medicina se hará», y aseguró que «en enero» se sentará con la UJI y las otras cuatro universidades públicas valencianas para «revisar la financiación y redefinir los criterios que marcan el reparto». Y siempre blandiendo la bandera de la infrafinanciación de la Comunitat. «Tendríamos 300 millones más para Educación y no habría problema de subvención».
Para infrafinanciación, la de la UJI: 1.500 €/alumno menos
«La UJI es la universidad peor financiada de una Comunitat a la cola de la financiación», dijo el rector, con las cifras en la mano. «La Jaume I recibe del Consell 5.255 euros por alumno, 1.500 menos que la media de las universidades, que es de 6.720 €». Ante lo que considera un agravio con València sobre todo, Climent reclama «soluciones», y reitera la necesidad de recibir más fondos, una máxima que se repite en sus declaraciones de las últimas semanas, para Medicina, pero también para la Universitat, que ha presentado un presupuesto a la baja de 98 millones de euros en pleno crecimiento de las titulaciones de Salud y del campus. Serían 17,8 millones más, que sumados a la deuda antigua, darían aire a la economía de la UJI y permitirían abordar nuevos proyectos o terminar Salud.
La sociedad cierra filas con el rector y exige fondos
Tal y como hizo entre el 2009 y el 2011, cuando la Jaume I quería implantar los estudios de Medicina y Enfermería, la sociedad civil ha cerrado filas con el rector y clama por más financiación para la universidad y fondos extra para Salud. Lo han dicho los alcaldes de Castellón a Vila-real, Burriana, la Vall, Almassora, Onda, Benicàssim, Vinaròs, Benicarló y Nules, pero también el presidente de la Diputación, Javier Moliner; el del Consell Social de la UJI, José Luis Breva; el rector honorífico, Francesc Michavila; los hospitales de Castellón, además de los representantes de la comunidad educativa del campus, del Consell de l’Estudiantat a los sindicatos de profesores y PAS. Todos a una claman por «no dejar a medias el edificio», porque la Generalitat dé un «empuje económico» para la nueva sede, que es «irrenunciable» y «necesaria», dicen.
Puig «garantiza» acabar la obra y Climent pide «atarlo»
El president, Ximo Puig, garantizó la financiación para terminar las obras de Salud en la UJI, en el marco de un «compromiso incuestionable» con la universidad, pidiendo que no tema de los incumplimientos pasados porque se negociará y se cumplirá con la sede. El rector, a la espera de iniciar en enero las negociaciones, quiere «atar el compromiso de pago», para «iniciar la licitación con garantías», en el último tramo de su último mandato en la UJI.
