Los trabajos el refuerzo del firme de la CV-10 en la variante de Borriol han arrancado hoy con «obras las 24 horas del día, los siete días de la semana para minimizar el impacto en la afección del tráfico». Son palabras del director general de Obras Públicas, Carlos Domingo, que explicó que los trabajos, que durarán seis semanas, hasta mediados de julio, se realizarán entre los puntos kilométricos 17,600 y 24,000 y, aunque cortarán una de las calzadas, dejará abierta al tráfico la otra.

Y durante la primera jornada ya se están produciendo colas que, según la Guardia Civil de Tráfico, superan los dos kilómetros por sentido. También la Dirección General de Tráfico (DGT) advierte en su página web de las consecuencias de los trabajos:

Los primeros días se interrumpirá el acceso el vial de Castellón a Sant Mateu, y los vehículos podrán discurrir por la habilitada, mediante los pasos de mediana o transfers debidamente acondicionados. En una segunda fase, será al revés.

Y, mientras duran las obras, los transportistas exigen que la AP-7 sea gratis. Desde la Asociación Castellonense para el Transporte de Mercancías se exige al Gobierno central que levante el peaje ya que «está prohibido el paso de vehículos pesados en la nacional 340 entre Nules y Orpesa», y ante las «colas kilométricas» que se auguran en estas seis semanas.

REFUERZO NECESARIO

Domingo explicó que «la obra, al igual que sucedió con la ejecución del tramo de la variante de Betxí, se ha estudiado con el máximo detalle posible y cuenta con los equipos más modernos para lograr no sólo la calidad que requiere la autovía sino también para acortar en la medida de lo humanamente posible la afección a los usuarios». Para ello, Obras Públicas licitó las obras por un importe de 5,422 millones para los dos tramos afectados, primero entre Betxí y Onda, y ahora entre Borriol y Castellón.

Con las cifras del 2017, la autovía absorbe a diario 42.678 vehículos, de los cuales 9.168 son camiones, 2.500 más que antes del cierre de la N-340.

El objetivo es reforzar superficialmente el pavimento de tres tramos de la autovía deteriorados. Y, como ha resaltado el director general, se trata de «una importante actuación de conservación de carreteras en la Comunitat, cuyos objetivos son detener la degradación de los pavimentos, aumentar su capacidad portante y, al mismo tiempo, aumentar la textura de la capa de rodadura, de gran importancia para la seguridad vial de la circulación de los vehículos».

LAS CLAVES

EL TERCER TRAMO CONECTARÁ CON VILA-REAL Y ONDAEl tercer tramo, que se ejecutará más adelante, será el de la intersección de la CV-10 con la CV-20 Vila-real-Onda, entre los kilómetros 8,000 y 9,000. Solo se actuará en el margen derecho. UNA SEMANA DE RETRASO POR LA SELECTIVIDADLas obras debían empezar hace una semana, pero se retrasaron a petición de la UJI, ya que de martes hasta el jueves empezaba la selectividad, con la llegada de autobuses de toda la provincia.