El Defensor del Pueblo ha abierto una actuación de oficio por el asesinato de las dos niñas a manos de su padre, que ya había amenazado con matarlas, y ha pedido información al Ministerio del Interior y la Fiscalía General del Estado. En concreto, según indica esta institución, Francisco Fernández Marugán ha solicitado a la Secretaría de Estado de Seguridad y al máximo órgano de los fiscales que aclare si existía denuncia previa por violencia de género en el ámbito familiar y si se había adoptado por el órgano judicial competente una orden de alejamiento de las menores.

Además, ha demandado conocer si existía una valoración del riesgo por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y, de ser así, quiere saber a quién se había comunicado dicha estimación.

Mediterráneo ha publicado que dicha orden fue denegada por el juzgado, que la valoración policial fue de riesgo bajo y que en el mes de enero se notificó al juzgado un parte médico sospechoso y en febrero la mujer denunció a su marido por amenazas.

El Defensor lleva años mostrando su «grave preocupación» por los hijos de las víctimas de violencia de género y considera «imprescindible y de vital importancia» visibilizar la situación de estos menores que también son víctimas de la violencia machista». Fernández Marugán incidió en que «un maltratador nunca puede ser un buen padre».