El ciclón Leslie ha dejado huella en Castellón. Los coletazos del huracán minorizado ya en su entrada en la Península, se dejaron notar en forma de intensas precipitaciones que barrieron la provincia en varias bandas de sur a norte, atravesando todo el territorio, primero a mediodía, y más tarde con trombas y registros de hasta 60 l/m2 en una hora en Alcalà (de 15.30 a 16.30 horas, según la Agencia Estatal de Meteorología), lo que obligó a cerrar la Fira de la Tomata, además de causar desperfectos en el polideportivo y cortes de electricidad.

En el registro acumulado hasta las 22.00 horas llegó a los 100,2 litros tras un día de lluvias generalizadas en costa e interior con topes de precipitación de 88,4 en Cervera (27 en una hora), 67,8 en la Pobla de Benifassà, o 52 en Traiguera (22,4). Menos, pero sin perdón, llovió en Atzeneta, con 43; 46 en Traiguera, 39,6 en Benafigos o 33,8 en Vinaròs, además de 15 en Castellón y Almassora.

En Altura, una tromba de agua de 25 l/m2 en solo 30 minutos provocó que el muro lateral del puente del camino de la ermita en la zona de la Jarea se derrumbara y el vial quedara cortado.

Y, a mitad mañana, desde la costa de Moncofa se avistó una manga marina, que no llegó a tocar tierra y se desplazó hacia el sur. En Albocàsser, el viento (de 53 km/h en Xert y 44 en Catí) y las precipitaciones obligaron a cerrar la Fira de l’Ametla.

Aemet levantó ayer la alerta naranja, que se sitúa en Cataluña, Aragón, la Rioja y Baleares, avanzando una previsión con un nuevo frente de lluvias cara al jueves y temperaturas sin cambios.

Informan R. Martín, M. Sánchez, B. Roig, J. Ortí.