Cuenta atrás para el inicio de la segunda fase de las obras en la residencia Lledó de Castellón. La vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas publicó ayer la formalización del contrato de los nuevos trabajos, que acometerán una reforma integral del centro.

Como ya sucediera durante la primera etapa, en 2016, las obras se llevarán a cabo sin que las personas que residen tengan que abandonar las instalaciones y trasladarse a otro centro. Fuentes del departamento que dirige Mónica Oltra confían en que los trabajos den comienzo «lo más rápido posible». Antes de llegar a ese punto, el Ayuntamiento tiene que aprobar la licencia y tanto el consistorio como la empresa adjudicataria de las obras deben firmar el acta de replanteo, el último trámite antes de poder empezar las tareas de remodelación.

Con una capacidad para 43 personas, desde Conselleria apuntan que actualmente hay entre 25 y 30 usuarios en situación de dependencia en la residencia, cuya segunda etapa de trabajos cuenta con un presupuesto de 2,1 millones de euros.

Amplia rehabilitación

Si las obras de la primera fase se centraron en rehabilitar el centro para ajustarse a la normativa en materia de seguridad por incendios y adecuar de forma urgente las dependencias que presentaban un aspecto más deteriorado, la nueva tanda de trabajos abordará la mejora, modernización y ampliación del edificio.

La previsión de ejecución de este proyecto contempla distintas actuaciones que se harán de forma escalonada y con una continua coordinación con la dirección facultativa y la del centro, de manera que no iniciarán la siguiente fase hasta que no se termine la anterior, para que no afecte la cotidianidad de las personas residentes, o lo haga de la menor manera posible. En el plan está previsto que cuando se termine una zona, esta pasará a ocuparse por los usuarios, garantizando en todo momento la evacuación de la residencia.

Según especificaron desde la Conselleria de Igualdad, los operarios remodelarán la escalera y la cocina, entre otras muchas estancias del centro de mayores. A su vez, la fachada y estructura del edificio también sufrirán un importante lavado de cara, pero se mantendrán en un 80%. H