Antes de lograr la ansiada doble plataforma, reivindicada por todos los ponentes y participantes en las jornadas sobre el corredor mediterráneo que se celebraron ayer en la Universitat Jaume I, en Castellón hay camino por recorrer, pues hay que completar la implantación del tercer hilo hasta València. Las últimas obras para hacer realidad esta infraestructura --un «Corredor a medias», como lo definió ayer uno de los intervinientes en privado-- comenzarán a principios del 2019, según confirmó el comisionado del Gobierno para el corredor mediterráneo, Josep Vicent Boira.

Boira aseguró que en los últimos días se ha completado uno de los últimos trámites necesarios antes de iniciar las obras, como es la apertura de las ofertas económicas, del que se deriva que la empresa Acciona será la encargada de unos trabajos cuyo coste está presupuestado en 55 millones de euros.

La duración estimada de los mismos es de 24 meses, con lo que el tercer hilo no se completará hasta el 2021, más de un año después de la previsión que realizó el anterior ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, que se comprometió a tener finalizado este proyecto a finales del año próximo. El ejecutivo trabajará en fines de semana y periodos vacacionales para minimizar las molestias a los usuarios.

Minimizar las molestias

Desde Adif reconocieron que si se trabajara de forma ininterrumpida se podrían acortar los plazos, pero prácticamente cuatro años de continuas obras entre Castellón y València llevaron a desaconsejar esta opción. Así, la empresa pública reconoció que inevitablemente habrá «afectaciones», pero que intentarán minimizarlas en la medida de lo posible.

No obstante, esta no será la última obra del Corredor a realizar entre las capitales de la Plana y del Turia. Y es que la estación final del Corredor en la provincia es la doble plataforma, que en la actualidad está en estudio, un trámite que según las previsiones gubernamentales no finalizará hasta febrero del 2020. Entre las ventajas de su implantación destaca el hecho de que permitirá que el AVE entre Castellón y Madrid gane velocidad y supere los 160 kilómetros por hora actuales, reduciendo el tiempo de viaje. Además, se reducirá la saturación de las vías, beneficiando de esta manera la circulación de los Cercanías.

En esta línea, la consellera de Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, afirmó que el Corredor «no sirve solo para exportar, sino que también será una infraestructura muy útil para las personas porque mejorará de forma sensible la movilidad en la provincia». En el mismo sentido, la rectora de la UJI, Eva Alcón, apuntó que se trata de «una infraestructura clave para el bienestar de la sociedad castellonense».

Alcón pidió mantener el tono reivindicativo, mientras Salvador afirmó que con el actual Gobierno --con el valenciano José Luis Ábalos como ministro de Fomento-- estas obras se sitúan «en el epicentro de las políticas».