Natalio García es menos conocido para el gran público que otros castellonenses ilustres como Miguel Ángel Silvestre, Carlos Latre, Mendieta o incluso que su padre, el artista Ripollés. Sin embargo, la labor de este investigador merece tantas portadas o más que la del mejor actor o futbolista. Pocos provinciales podrán presumir de haber descubierto una célula en el pulmón que puede ser clave a la hora de combatir enfermedades como la legionella o de haber aplicado en animales un modelo que permite conocer mejor la vasculitis autoinmune.

En la imagen inferior vemos a Natalio García junto a sus hijas Daphne y Frida en el Museum Ludwig de Colonia:

Como vemos, toda una eminencia que lleva dos décadas desarrollando su labor en Alemania, concretamente en la Universidad de Bonn. Cuando se le pregunta por la posibilidad de volver a España, y a su Castellón natal, responde: «A las fronteras no les hago mucho caso. Mi mujer es entre griega y sudafricana, y yo llevo casi media vida en el extranjero, así que si me sale una oportunidad de cambiar no tendría problemas, pero sin prisa”.

Apuesta por la investigación

Apuesta por la investigación Aunque suene a tópico, en Alemania las posibilidades para un investigador de su altura son por desgracia bastante mayores que las que tendría en su país de origen: «Estudiando un doctorado en Escocia me surgió la posibilidad de venir en 1999 y desde entonces aquí sigo como catedrático en un instituto de inmunología experimental. Antes estaba más centrado en la lucha contra el cáncer y ahora, con un equipo más grande, estamos también investigando la respuesta inmune contra las bacterias en el pulmón».

Natalio se siente «totalmente integrado al país» y destaca las ayudas institucionales: «En el instituto somos 30 personas, y a mi cargo tengo una decena de investigadores. En la Universidad de Bonn contamos con seis programas Cluster Excellence dotados con unos 50 millones de euros cada uno, así que no nos podemos quejar. Angela Merkel prometió apoyar la ciencia con un incremento del 5% anual y es una dotación que está protegida por ley». Igual que en España…

Imagen de Natalio junto al personal de su laboratorio en el Mercado Navidad de Bonn:

Como especialista en la lucha contra el cáncer, la pregunta es obligada: ¿Se erradicará esta lacra en un futuro? «Personalmente creo que no porque no es una enfermedad, sino muchas, pero sí se podrá controlar mejor. Ya se ha experimentado un enorme avance con inhibidores de puntos de control inmunitario y dentro de poco tiempo muchos tipos de cáncer no supondrán una sentencia de muerte. De hecho ahora muchos especialistas en ciertos tumores ya recomiendan decir otro nombre porque se puede tratar relativamente bien», asegura Natalio, que tiene este consejo para fumadores: «Si no existiera el tabaco, el 95% de los neumólogos no trabajarían…».

Imagen del investigador castellonense en Melbourne (Australia) junto a sus compañeros:

Sobre los descubrimientos que ha realizado en estos años de investigaciones, con la humildad que caracteriza a las mentes preclaras, asegura que no puede «dar falsas expectativas. Nuestro trabajo se realiza para ser aplicado, pero decir que permitirá curar alguna enfermedad sería un poco atrevido». Al respecto de la citada célula que «con toda probabilidad» habrá descubierto en el pulmón y cuestionado por el nombre con el que se la bautizará, responde con una sonrisa: «Estaría bien llamarla Castelloncito en honor a mi ciudad natal».

Imagen de una reciente visita de la familia al completo de Natalio García a la provincia de Castellón, concretamente en Fredes:

Por último, al ser preguntado por cómo lleva ser el hijo de Ripollés, confiesa: «Me gusta ser el hijo de Ripo. Es un orgullo tener un padre y una madre como los que tengo». Asegura además que el polifacético artista le visita siempre que puede: «Está muy liado entre China, Italia o España, pero ha venido unas cinco veces porque física y mentalmente está como un toro y no le molesta volar».