Adif cortará la línea ferroviaria de Zaragoza a Sagunto del 9 de julio al 5 de octubre para realizar obras de modernización, dentro del Plan Director de la línea, que tiene previsto invertir hasta 2023 un total de 386 millones de euros, de los que los primeros cien se habrán ejecutado al final de estas obras y el resto se dedicarán principalmente a la electrificación de la línea.

Así lo han explicado los responsables de Adif y Renfe tras reunirse este jueves en Teruel con representantes de los ayuntamientos de las provincias de Zaragoza, Teruel, Castellón y Valencia afectados por el corte de la vía, así como responsables de la Autoridad Portuaria de Valencia y de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril y Teruel Existe.

El director general de Conservación y Mantenimiento de Adif, Ángel Contreras, ha destacado en rueda de prensa que el objetivo de estas obras es "la modernización" de la línea en general, mejorar su capacidad para el transporte de mercancías y en definitiva ganar en "competitividad".

Los trabajos consisten en el tratamiento de terraplenes y la consiguiente eliminación de limitaciones temporales de velocidad, la construcción de vías de apartado de 750 metros, la ejecución de un nuevo paso inferior en Teruel y la renovación de la superestructura de vía, para lo cual es necesario la interrupción de los servicios por dicha línea.

El corte de la vía se ha realizado en un periodo en el que hay menor demanda de transporte de mercancías, ha explicado Contreras, y se ha ajustado para poder atender a los viajeros con motivo de dos festividades de las Fiestas del Ángel de Teruel y el Pilar de Zaragoza.

Unas 6.000 personas en Teruel se estima que se verán afectadas por este corte, aunque son 60.000 los viajeros de toda la línea, según las estimaciones que ha apuntado, José Enrique Cortina, director general del Servicio Público de Renfe.

Para garantizar la movilidad de los usuarios, Renfe habilitará un servicio alternativo por carretera entre Zaragoza y Valencia en autobús, microbus o incluso taxi, según la demanda, a precios que se mantienen. Por su parte, las circulaciones de mercancías se desviarán por rutas alternativas.

Se prevé reanudar el tráfico de cercanías de la línea C-5 en el trayecto Sagunto-Caudiel a partir del 15 de septiembre. Posteriormente continuarán los trabajos en banda de mantenimiento y, en su caso, ha explicado Contreras, se llevará a cabo algún corte extraordinario puntual.

Hasta el momento, se han realizado o se encuentran en ejecución obras adjudicadas por valor global de más de 64 millones de euros (IVA incluido) para desarrollar actuaciones de mejora de la infraestructura y de la capacidad y prestaciones de la línea.

Entre ellas, han explicado, la supresión de 8 limitaciones temporales de velocidad, la instalación del sistema tren-tierra, la renovación de 11 estructuras para el aumento de la capacidad portante 22,5 toneladas por eje, o la adaptación de estaciones a la circulación de trenes de mercancías de 750 metros.

Asimismo, se han adjudicado contratos de suministro de materiales para la ejecución de obras por importe conjunto de 30,8 millones de euros (IVA incluido).

Con estas actuaciones, ha incidido Contreras, se ha aumentado la disponibilidad de la infraestructura al permitir circulaciones las 24 horas y se han reducido los tiempos de viaje del orden de 3 horas para los tráficos de mercancías, incrementando los surcos hasta casi 30 trenes semanales, y de 23 minutos para los servicios de viajeros.

Además, se ha homogeneizado la carga máxima de las circulaciones de mercancías, mejorando su competitividad, ya que el aumento de la capacidad portante permite que un tren transporte un 12,5% más de carga.

En este sentido, el subdirector general de la Autoridad Portuaria de Valencia, Manuel Guerra, entidad que aporta financiación a este plan, ha destacado que las inversiones hechas hasta ahora han permitido aumentar de manera considerable el paso de trenes de mercancías semanales, por lo que espera que cuando finalicen los trabajos todavía se incremente más el uso de la línea.