La problemática del top manta afecta por igual a los pequeños comerciantes de los principales destinos turísticos del litoral mediterráneo, entre ellos los castelloneses. Por ello, el sector, a nivel provincial, exige medidas contra la administración competente para acabar con las mafias que hay detrás de los manteros.

El vicepresidente segundo por Castellón de ComfeComerç CV, patronal del pequeño comercio valenciano, Mauro Gómez, manifestó ayer que están pendientes de mantener una reunión con el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio, para tratar la situación. «Se aplazó y estamos esperando una nueva cita», explica Gómez, quien es consciente de la dificultad para atajar esta práctica irregular pero considera necesario frenar la competencia desleal por las nefastas consecuencias que afecta a los pequeños establecimientos.

«Pedimos que se aplique la reglamentación vigente, nosotros pagamos impuestos y cumplimos unas obligaciones y los manteros no lo hacen», manifiesta.

«Por una parte está el lado humano, pues uno puede ponerse en la piel de esas personas que venden en los paseos marítimos, pero hay que mirar más allá y actuar contra las redes que se ocultan tras ellos», asegura.

De hecho, lamenta que la situación está causando grandes perdidas al sector hasta el punto de que algunos comercios que esperan el inicio de la temporada estival para aumentar sus ventas están no lo hacen, incluso algunos están al borde del cierre de sus negocios por la situación.