Sobre la situación del sector en Castellón, el director general de Pesca, manifestó que «históricamente, la provincia ha registrado un descenso importantísimo de las capturas de pesca. Ciertas especies están mejor que en otras zonas». Ya con una apuesta por evitar la sobreexplotación, ahora, considera que las medidas más urgentes pasan por «recuperar la biomasa y los estocs pesqueros. Ciertas especies sí han desaparecido por falta de alimento». Con todo, quedan 137 especies consumibles y comerciales en Castellón y la Comunitat». Y destacó además la alta calidad: «Aquí tenemos el mejor pescado a nivel sanitario. Cero anisakis en la Comunitat en el 2019 y solo un caso en el 2018. En Croacia y el Atlántico se dan más».

Subrayó los importantes protocolos de seguridad alimentaria en las lonjas; y subrayó la implicación de los pescadores, «que contribuyen a sostener el ecosistema marino, su medio de vida. Lo positivo es que autoridades y pescadores están adoptando medidas».

En Castellón, «los pescadores son parte de la solución y ya están implicados --para evitar la sobreexplotación-- con la limitación de los días en los que salen a faenar; la extracción de plásticos; y el avistamiento y rescate de cetáceos».

Con todo, la degradación del mar «es multifactorial y no todo es por la sobreexplotación. Puede venir por la contaminación terrestre, falta de aporte nutricional de los ríos, contaminación acústica, turismo de cruceros, etc.».

Para Llanes, una parte importante para el futuro de la vida submarina es la legislación «La pesca es un sector muy regulado, más que otros. Tenemos siempre presente la directiva que marca la Unión Europea sobre economía azul». Y añadió que, aunque se trabaja en recuperar masa y producción de pescado procedente del mar «se puede compensar con el criado en acuicultura».