¿Es realmente necesario un Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) destinado a procurar la supervivencia de los ecosistemas marinos? Para la vicerrectora de la UJI responsable de ODS, Inmaculada Rodríguez Moya, la respuesta es un sí. «La Universitat Jaume I, además, está llamada a ser clave en los ODS, sobre todo en el número 4, el relativo a la educación. El estudiantado es quien en un futuro desarrollará acciones para velar por esos ODS», manifestó.

En su opinión, además, la UJI está llamada a liderar, «como institución neutral, que se puedan favorecer alianzas entre organismos y empresas. Eso sí, lo primero es realizar un diagnóstico; y lo segundo, acciones». Desde la Universitat Jaume I, Rodríguez Moya considera que se puede desarrollar una labor fundamental «aportando investigación y sensibilización, cooperación con oenegés, etc.». En el apartado de I+D+i, pues, va a jugar un gran papel el nuevo centro de robótica marina, «que será pionero en la Comunitat y el segundo de España».

El Centro de Investigación en Robótica y Tecnologías Subacuáticas (Cirtesu) aspira a ser, en palabras de la vicerrectora, «una herramienta para facilitar la investigación de la vida marina y afrontar retos». Y, ¿por qué no?, también la UJI puede desarrollar su función «en investigación para un turismo sostenible».

El proyecto del Citersu, que se encuentra en su fase final, prevé comenzar a funcionar en pruebas en el segundo semetre del 2020. Colaborará con el CSIC y contará con un tanque con capacidad para medio millón de litros de agua. «Se desarrollarán robots que cooperen y den información acerca de los fondos marinos: arqueología subacuática y vida submarina. El problema de este ecosistema --castigado-- es multifactorial y, dado que los 17 ODS interactúan, la solución debe ser global y multidisciplinar», opinó.