El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Castelló, Alejandro Marín-Buck criticó que «el coste de la reforma del edificio Borrull, que asciende a 16,8 millones de euros, es el precio que tenemos que pagar los castellonenses por el desa-cuerdo entre el Fadrell y el Botànic», en referencia a los gobiernos local y autonómico.

El portavoz de Ciudadanos reprochó al tripartito su gestión porque «Borrull tampoco será una realidad esta legislatura». Marín-Buck lamentó que no haya colaboración entre las instituciones, y explicó que «si la rehabilitación del edificio de los antiguos juzgados fue la promesa y el incumplimiento del Pacte del Grau la pasada legislatura, cuando iba a ser un proyecto cofinanciado, ahora que la administración autonómica se de-sentiende y la obra supone un sobrecoste de más de cuatro millones de euros, el tripartito va a volver a incumplir la promesa de Borrull».