Pasa con la justicia, donde el parón de la actividad por la pandemia ha empeorado el atasco en los tribunales, y pasa también con las ayudas a la dependencia, cuyas tramitaciones han sufrido un frenazo muy importante por la crisis sanitaria internacional. Colectivos de Castellón y sindicatos avisan. La gestión de las prestaciones para los más vulnerables, aquellos que no pueden valerse por sí mismos y tienen necesidades especiales, sufrirá retrasos importantes y acabará en un «embudo» a causa de la epidemia. Lo hará, además, en un momento marcado por los expedientes de regulación de empleo, cuando las familias más necesitan una ayuda económica.
2.506 PERSONAS EN ESPERA / En la provincia hay en estos momentos 11.188 beneficiarios de ayudas, pero también 2.506 personas en lista de espera, pendientes de una resolución por parte de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. La cifra de quienes aguardan para recibir una subvención es mucho mayor y la razón es sencilla. Entre esos 2.506 castellonenses no están contabilizados quienes están a la espera de ser valorados, sino únicamente quienes se han sometido a la evaluación y aguardan el dictamen. Además, estas valoraciones, que deben hacerse en el domicilio del dependiente de forma presencial, llevan sin realizarse desde que comenzó la crisis sanitaria internacional, es decir, tres meses, según indican desde la Plataforma en Defensa de la Ley de Dependencia de Castellón.
«En el pago de ayudas a quienes tienen reconocida la dependencia no se han registrado problemas. Las resoluciones de aquellas valoraciones que se habían hecho antes del confinamiento han continuado tramitándose gracias al teletrabajo de los funcionarios. El verdadero problema está en las valoraciones que no se han hecho en todo este tiempo y que ahora habrá que ir recuperando, con el consiguiente atasco», indica Carmen Santamaría, portavoz de la plataforma.
RECLAMAN MÁS MEDIOS / La delegada de Política Social de Comisiones Obreras, Ana Belén Montero, asegura que, aunque la Conselleria ha hecho muchos esfuerzos en los últimos meses para que la situación mejore, «ahora no es suficiente». «Hay que agilizar las concesiones con más dotación presupuestaria y más plantillas. Aunque hay más beneficiarios, la lista de espera va a más», afirma.
Desde Aspropace Castellón corroboran que el reconocimiento de ayudas se ralentizará tras el parón provocado por la pandemia. «Esta crisis nos ha afectado en la funcionalidad del día a día. Todo se ha ralentizado y el país se ha parado», sostiene su presidente, Gregorio Sánchez.
Desde Cocemfe advierten de que «hay quien necesita una revisión de su grado de discapacidad y no puede hacerla porque está todo parado». El director de la entidad, Samuel Miralles, lamenta que, como en toda crisis, «los más vulnerables van a ser los más afectados» y recuerda que las familias de los dependientes necesitan «prestaciones y terapias».
Por su parte, la presidenta de la Fundación Síndrome de Down Castellón, Rosa Prades, reclama medios para agilizar las valoraciones de los dependientes.
