El pequeño comercio de Castellón está «muy dividido» ante la campaña de rebajas, aunque Confecomerç prevé al final que buena parte las hagan, de forma escalonada este julio, y solo una minoría las aparque hasta el año que viene.

Y es que el confinamiento por el covid-19 ha dejado muchas prendas por vender a su precio habitual por lo que la intención era atrasar los descuentos a agosto o incluso no hacer campaña.

«Pero si la franquicia de al lado tiene género al 40%, no te deja opción», señala la presidenta de Castelló Espai Comercial, Rosario Brocal, quien señala que la rivalidad de las grandes superficies comerciales, adelantando la campaña de rebajas de verano y con precios muy agresivos, ha hecho que el sector claudique.

UNOS SÍ, Y OTROS, NO

«Unos ya tienen rebajas, otros no, y otros, a principios de julio. Este año. Somos autónomos con muchos gastos que afrontar y este año no se ha veniddo casi nada. Muchos comerciantes no quiere tirar el género de precio y prefieren quedárselo si no lo venden, antes que hacer descuentos grandes», explicó. De hecho, desde la asociación perteneciente a Confecomerç se estima que un 20% de pequeñas tiendas no hará rebajas este verano por primera vez en su historia; y quien cuelgue el cartel, aplicará unos descuentos más bien modestos respecto al precio inicial, del 15 ó 20%. Y es que el margen es muy ajustado.

En la línea, la secretaria general de Covaco-Castellón Confecomerç, Tere Esteve, apuntó que «con el impacto del covid-19 en las ventas, al permanecer cerrados desde mediados de marzo, queríamos retrasar las rebajas pero al final, desde principios de julio, paulatinamente, se irán haciendo». «Se colgó la ropa de primavera y no dio tiempo a vender apenas el textil, al llegar el estado de alarma. Rebajar prendas que no han estado a la venta ni un mes es un golpe muy duro», concluyó Esteve, sobre este atípico 2020, sin una campaña conjunta de promoción del comercio de barrio.

PRIMER FIN DE SEMANA COMPLETO DE COMPRAS BARATAS

Las grandes superficies comerciales han podido abrir este fin de semana, el primero de las rebajas de verano, incluido ayer domingo, aunque solo en Castelló, dado que hoy lunes, 29 de junio, es fiesta local de Sant Pere y en la capital las tiendas permanecerán cerradas. La siguiente jornada dominicial, la del 5 de julio, será aperturable para el comercio provincial.

MUCHO ESTOC DE MODA SE DEJARÁ PARA 2021

La crisis sanitaria internacional del coronavirus ha puesto a prueba al comercio, pero en especial, al de proximidad, que mira ahora cómo cerrar el año sin pérdidas. «Los comerciantes que prefieren no hacer rebajas de verano están dispuestos a que les sobre género y tengan que sacarlo la temporada del año próximo a tirar de precio los artículos», señaló la presidenta de Castelló Espai Comercial, Rosario Brocal.

Una situación como esta, de tener los negocios tantos días cerrados y con eventos anulados (como bodas, comuniones, etc. que ya se empiezan a recuperar), no se había vivido nunca. «Es que los establecimientos ya tienen la ropa de otoñó-invierno comprada, y si tenían algún que otro pedido extra, se ha anulado», indicó. Y es que falta liquidez para comprar el género nuevo. «Tenemos las tiendas llenas ya, porque se compra a seis meses vista. Y las fábricas de textil están muy pendientes del covid-19 y quizás no produzcan tanto este otoño», agregó.

Desde Confecomerc también alertaron que «en estas rebajas, ya de por sí con mucho estoc y poco vendido por el covid-19, se suma que hay formatos comerciales que a veces sacan en rebajas ropa que no es de temporada».