Centenares de agricultores han reclamado este viernes en València la autorización de herramientas de lucha eficaces y el pago de compensaciones por los daños ocasionados por la plaga del Cotonet de Sudáfrica, cuyas pérdidas durante la próxima campaña citrícola superarán los 120 millones de euros en la Comunitat Valenciana.

Los dirigentes agrarios de AVA-Asaja y La Unió de Llauradors i Ramaders han denunciado la descoordinación y el enfrentamiento entre las distintas administraciones para garantizar la sanidad vegetal en la concentración ante la Delegación del Gobierno en València, que ha tenido como lema "Nuestros cítricos están en peligro. Soluciones para el Cotonet ya" y ha sido apoyado por FEPAC-ASAJA Castellón, UPA-PV y el Comité de Gestión de Cítricos.

El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha rechazado "el juego de tenis que están disputando la conselleria de Agricultura y el Gobierno central, cuando todos tienen culpa en el problema de las plagas y enfermedades agrarias", según han informado en un comunicado conjunto con La Unió.

El Gobierno, ha criticado, no evitó la entrada del Cotonet por el puerto de Sagunto y la Generalitat "tampoco hizo los deberes para erradicarlo". La Unión Europea, por su parte, tiene una política fitosanitaria que suprime materias activas "sin ofrecer alternativas viables, lo que dispara el desperdicio alimentario y arruina a los agricultores".

El secretario general de La Unió, Carles Peris, ha lamentado que la Unión Europea es "un auténtico coladero de plagas" y a los agricultores europeos les prohíben cada vez más materias fitosanitarias mientras dejan entrar importaciones de países terceros que siguen utilizando esas mismas sustancias, lo que genera "una competencia desleal".

"La Generalitat da ayudas a todos menos a los agricultores y cuando nos prometen algo, después no lo cumplen. En cuanto al ministro de Agricultura, Luis Planas, no hace nada por los agricultores valencianos y parece que busca un sillón en Bruselas", ha afirmado.

Según han especificado, los 120 millones de euros de pérdidas en la Comunitat Valenciana corresponden a 114 millones por los perjuicios directos sobre la fruta y 6 millones por el coste de los tratamientos.

Las organizaciones agrarias han registrado un documento reivindicativo dirigido a la delegada del Gobierno, Gloria Calero, para que traslade a Madrid otras demandas como la asignación de un único puerto de entrada por estado miembro de los cargamentos de cítricos procedentes de terceros países, a fin de lograr la máxima especialización y mejorar la coordinación de los controles fitosanitarios de la UE.

También piden establecer inspecciones de seguridad alimentaria y sanidad vegetal en los países de origen; exigir al laboratorio nacional de referencia, que el Gobierno "ha trasladado de Valencia a Lugo", que realice análisis de muestras asintomáticas a la fruta que entra por el puerto de Vigo; así como establecer una etiqueta distintiva que realce las ventajas fitosanitarias y ambientales que presentan los productos agrarios europeos respecto a los foráneos.

Con este acto de protesta, el sector agrario valenciano continúa con el calendario de movilizaciones iniciado a principios de año, interrumpido durante el estado de alarma por la covid-19 y retomado el pasado 26 de junio con un acto ante la Conselleria de Agricultura en protesta por la "desastrosa" campaña de cebollas y patatas en la huerta valenciana.

Si las administraciones no proporcionan soluciones, el sector agrario valenciano advierte de que puede haber "un otoño caliente".