Paso de gigante para que el Plan General Estructural de Castelló (PG) sea por fin una realidad. La comisión de evaluación ambiental de la Conselleria de Medio Ambiente dio este jueves su visto bueno al proyecto urbanístico y le otorgó la declaración favorable condicionada, hecho que obligará al Ayuntamiento a realizar modificaciones para adaptar su versión del planeamiento a las exigencias fijadas por los técnicos autonómicos.

Se cumple así, como ayer publicaba este periódico, el escenario más probable de los tres posibles: que el plan siga adelante con la tramitación, aunque deberá incluir «pequeñas correcciones ambientales», tal como remarcó la secretaria autonómica de Transición Ecológica, Paula Tuzón, que explicó que estos reajustes son habituales en este tipo de trámites y que no precisan que el comité se vuelva a reunir para evaluarlos.

Reacción

El concejal de Obras y Proyectos Urbanos, Rafa Simó, adelantó el aprobado del plan en rueda de prensa, quien no ocultó su satisfacción por «pasar de fase» y «entrar en la recta finalísima». «Es una muy buena noticia para toda la ciudad», comentó, y tiró de una metáfora ciclista para valorarla: «Si la tramitación del Plan General es el Tour, con este paso hemos superado ya el Tourmalet y, aunque aún nos quedan kilómetros por hacer, ya hemos pasado la parte más importante», dijo.

A la espera de conocer las puntualizaciones que marque esta declaración ambiental y territorial estratégica (DATE), el edil asegura que el consistorio ya tiene la parte técnica preparada para que, en el momento en que llegue la documentación, empezar a trabajar para adaptar el PG a esos condicionantes que marque la DATE». «Estamos cada vez más cerca de lograr el ordenamiento urbanístico que necesita la ciudad», remarca.

Alegría similar a la que mostró la alcaldesa, Amparo Marco, tras conocer el ok de Medio Ambiente, que defiende que esta luz verde al plan acerca más a la ciudad a recuperar la legalidad urbanística tras la anulación del PGOU en 2008. «El plan general es un instrumento fundamental para aportar seguridad jurídica y atraer inversiones, y supondrá un motor económico para Castelló», exclama.

Desde Compromís --uno de los socios de gobierno de los socialistas, junto a Podemos--, su portavoz, Ignasi Garcia, resalta la «celeridad» con la que Medio Ambiente ha emitido esta DATE tras recibir el informe de inundabilidad por parte de Obras Públicas hace unos días, lo que demuestra un «compromiso claro con la ciudad».

Camino a seguir

Los trámites pasan ahora a la arena municipal, ya que los próximos pasos hasta lograr la aprobación del PG dependerán del Ayuntamiento. Tras subsanar la documentación y corregir los apartados que establezca Conselleria, el consistorio se ha comprometido a realizar una segunda fase de exposición pública --de 20 días y «en aras de la transparencia y la participación», según Simó--, estudiar las alegaciones --que solo podrán ser sobre aspectos del plan que hayan cambiado respecto a la anterior versión-- y llevarlo a pleno para aprobar la resolución de estas reclamaciones al plan.

Después solo faltaría enviar el proyecto a la comisión territorial de Urbanismo, el último eslabón de la cadena, que tiene que ratificarlo. El objetivo es poder tener el documento aprobado entre finales de año y principios del 2021; la obligación, como muy tarde, abril del 2021, que es cuando caducan las normas transitorias de urgencias, que actualmente rigen el planteamiento urbanístico a falta de un plan de ordenación como tal.