Desde la concejalía de Movilidad Sostenible del Ayuntamiento de Castelló se ha iniciado un proceso para sustituir el actual sistema de bolardos retráctiles por un sistema de cámaras de reconocimiento de matrículas con el objetivo de mejorar la efectividad del sistema de control de accesos. Quienes tengan autorización podrán seguir circulando así por las calles que actualmente cuentan con bolardos, pero tendrán que identificar sus matrículas para facilitar el tráfico y perjudicar la picaresca.

Y es que la intención es la de evitar los problemas que puede generar el sistema actual con los bolardos, pues se han ocasionado colisiones de coches que se cuelan al paso de un vehículo autorizado, así como traspaso de tarjetas o siniestros al pasar por un bolardo en ascenso, así como su coste de mantenimiento.

“Se tratará de un sistema más efectivo, que permitirá velar por el cumplimiento de los accesos a determinadas zonas de restricción de vehículos y, además, evitará colisiones y siniestros a los usuarios, pacificando el centro de la ciudad y priorizando modos de movilidad más sostenibles”, ha indicado Jorge Ribes, concejal de Movilidad Sostenible.

Desde la corporación municipal han confirmado a este periódico que pretenden culminar este proceso de sustitución entre los meses de octubre y noviembre, pues ya ha comenzado la instalación de las cámaras y se procederá a retirar los citados bolardos tan habituales sobre todo en la zona centro de la capital de la Plana.