Es habitual avistar colonias de buitres en poblaciones del interior de Castellón. De hecho, en más de una ocasión en localidades como Morella o Vistabella la presencia de estas aves rapaces ha causado algún problema con los ganaderos. Lo que no es tan normal es ver a estos depredadores en una urbe como es la ciudad de Castelló. Ahora bien, sin ser frecuente, en los últimos años como vamos a comprobar es cada vez menos extraño ver a buitres en la capital de la Plana.

La última ocasión, que tengamos conocimiento, fue el pasado domingo. Un lector, Alfonso Cavero, remitió a Mediterráneo las imágenes de una cría de buitre ubicada en la antigua Nacional-340, entre Vila-real y Castelló, a la altura de la conocida como rotonda Matutano. Desde la Policía Local de la capital de la Plana confirman a este periódico que tuvieron que actuar para intentar rescatar el ave, e incluso solicitaron la colaboración del cuerpo de Bomberos. Les fue imposible, pero contaron con la colaboración del Centro de Recuperación de Fauna Forn del Vidre, que pidió a las autoridades que apartaran al buitre de la calzada para evitar que fuera atropellado. La explicación de la visita de esta cría de buitre, según los especialistas, fue el fuerte viento registrado el pasado fin de semana en la provincia, lo que dificultaba al ave volar con normalidad.

Imagen del buitre encontrado el pasado domingo en la antigua N.340.

No es esta la primera presencia de un buitre en Castelló los últimos años. Que tengan constancia en la Policía Local de Castelló estas visitas se han repetido solo en la década reciente en puntos como el Grau de Castelló, el parking de la Salera y en una vivienda abandonada de la Partida Bovalar. El ‘modus operandi’ de los agentes es siempre el mismo: recuperar el animal y entregarlo al citado centro Forn del Vidre, que es quien lo vuelve a soltar a la naturaleza tras comprobar que está en buen estado.

El último buitre en visitar Castelló no estaba herido aparentemente, por lo que no hubo que capturarlo. Lo que podemos dejar claro es que no pasó desapercibido: “Cuando pasé por la carretera parecía que hubiera un accidente con tantos coches parados y luego ya me di cuenta que era por el buitre. No perdimos la ocasión de fotografiarlo”, afirma el testigo de la visita, Alfonso Cavero.