La economía circular en el ciclo integral del agua precisará para seguir avanzando un apoyo normativo eficaz, una I+D+i colaborativa e incrementar la inversión con la colaboración público-privada y el aprovechamiento de los fondos europeos en camino. Así lo destacó Luis Basiero, director del Área de Saneamiento y Depuración en FACSA, en la primera de las ponencias del Ecoforum organizado por Mediterráneo. En su intervención, desgranó los múltiples proyectos en los que trabaja Facsa en un ciclo integral del agua, "también desde el inicio y en fases intermedias", y en concreto, ahondó en las estrategias en las estaciones depuradoras de aguas residuales en cuanto a reutilización, calidad y aprovechamiento energético (biogás, bioplásticos, fertilizantes, etc.), entre otros aspectos. "Vamos a necesitar una regulación eficaz. En España se legisla mucho pero no puede haber discrepancias. Debe darse un consenso interministerial y con Europa que regule la aplicación en la vida real del ciclo integral del agua", apuntó.

Asimismo, Basiera significó que la inversión pública en este ámbito ha caído a la mitad --pasando de 3.600 millones en el periodo 2003-2011 a 1.800 millones en el más reciente, de 2012-2017--; y será necesario elevar la dotación para infraestructuras. El modelo de innovación abierta con universidades, empresas y Administración también será clave, y en ello hay ejemplos de proyectos de Facsa con el Instituto de Tecnología Cerámica; y con socios europeos. Y otro puntal son las campañas de divulgación entre la población, que lleva a cabo Facsa.

Luis Basiera: "En Indonesia o Florida ha tenido mucho éxito las campañas de divulgación adecuada sobre el sistema de agua regenerada para consumo".

Entre las acciones para potenciar la economía circular Basiera citó que hay que comenzar por:

  • La planificación hidrológica de los recursos de forma eficiente.
  • El tratamiento de aguas en estaciones depuradoras y estrategias según tipo de agua, etc.
  • Red de suministro: importante evitar fugas y potenciar la eficiencia.
  • Consumo: aplicando estudios de monitorización.
  • Alcantarillado: vigilar fugas, sistemas de drenaje, etc.

Basiera citó que actualmente el 75% de aguas reutilizadas va para agricultura, un 12% industria y un 10% uso urbano. En cuanto a las normativas, alertó que habrá que estar atentos a una directiva europea sobre fertilizantes que puede cambiar las reglas para uso agrícola.