La actividad de un puerto tiene como base el transporte de materias y la contribución al crecimiento económico y la competitividad de la zona en la que se ubica. El presidente de PortCastelló, Rafa Simó, hizo referencia a ello, pero también a los planes que hay trazados para que esto se conjugue con los objetivos de desarrollo sostenible. “No son una opción de futuro, sino un compromiso y una oportunidad”, destacó.

Enumeró que la implantación de estos objetivos se fundamenta en tres grandes pilares: “La sostenibilidad económica con la innovación como bandera, la sostenibilidad social para establecer sinergias con nuestro entorno y ser el puerto de toda la provincia, y actuaciones medioambientales para trabajar con respeto a nuestro entorno”.

Esto se debe conjugar con las infraestructuras, que sean “sostenibles y productivas, que nos hagan ganar en competitividad, que crean empleo cuando se construyen y que luego generan riqueza”. Y esto debe ser compatible con la idea de que la gran expansión de los puertos “ha pasado a segundo plano”.

Simó aportó datos sobre el movimiento que se genera en PortCastelló. “Los datos de octubre nos elevan como el segundo de todo el sistema estatal en graneles sólidos, y además de referente en cantidad lo debemos ser en sostenibilidad”, con una serie de medidas que se aplican para reducir la emisión de partículas. Además, PortCastelló ocupa la primera posición en toda España en transparencia. “No queremos quedarnos ahí, mencionó”.

Crecimiento azul

Simó avanzó algunas de las claves del plan estratégico para los próximos años, proceso que inició su antecesor, Francisco Toledo, y que tiene como concepto principal el de crecimiento azul. Habló de optimizar espacios para generar más actividad y nuevos negocios con la digitalización como bandera.

“Para ello podemos establecer sinergias con la UJI, el CEEI, Xarxatec o Espaitec”, comentó. La apuesta por el ferrocarril enlaza con el uso de medios más limpios para el transporte, y a ello deben unirse las acciones de responsabilidad social corporativa, y medidas para la igualdad de género y diversidad y aplicar “una mirada morada” a todos los procesos.