"No nos podemos quejar». Con esta frase resume el gerente del Mercado Central de Castelló, José Luis Hernández, el desarrollo de la campaña navideña en el recinto, que aparece mucho más vacío que otros años pero que está manteniendo un nivel de ventas similar. El uso de las tecnologías está siendo clave en este sentido, ya que permite al comprador no tener que compartir espacios y recibir su pedido en casa.

«Las ventas están yendo muy bien. En este sentido están siendo muy importantes el uso de Whatsapp, que ya implantamos en los meses del confinamiento, y la nueva app Cistella. Ambas modalidades permiten el reparto a domicilio», dice Hernández. Una considerable ventaja en tiempos en los que es importante evitar aglomeraciones, «que es algo en lo que hemos insistido mucho».

Las restricciones de aforo y movilidad están significando un freno casi total a la actividad para sectores como el turismo o la hostelería. No así para la alimentación, beneficiada por el hecho de que las celebraciones navideñas se vayan a desarrollar en gran parte en los hogares particulares, con lo que el consumo no decrece.

Otro ejemplo de cómo el uso de la tecnología está siendo capital en el sector para soportar esta crisis es el de las tiendas de alimentación Antonio Mata, con cinco establecimientos en la provincia. «En estas fechas hemos vendido más del doble que el año pasado a través de nuestra página web», explica Sergio García, responsable de este departamento dentro de la firma.

También se han multiplicado los envíos a otros países desde la provincia, una tendencia en la que tiene que ver que muchos castellonenses que viven en el extranjero no podrán pasar las navidades con sus familias: «Nos llegan pedidos de Alemania, Dinamarca, Hungría, Francia...».

Parece que se cumple pues la previsión de la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) cara a las semanas festivas, que indicaba tras realizar una encuesta que el gasto se iba a recortar en conceptos como el ocio o en comidas fuera del hogar, pero no en alimentación para consumir en el hogar.

Otra previsión lanzada por el gerente del Mercado Central, que está por ver si se cumple, es que el gasto en Nochevieja será mayor al de otros años, de nuevo por las restricciones horarias, de movilidad y aforos, que provocarán muchas más celebraciones caseras.

«Tiene que haber un cambio generacional en el mercado, no solo respecto al público, sino en los métodos de venta. Hay un nuevo público que está demandando otras cosas», indica a modo de conclusión José Luis Hernández.