Los huertos de cítricos de Castellón evitan por una vez los daños derivados de un temporal. Las heladas de Filomena afectaron menos de lo temido, y de paso los agricultores mejoran sus ingresos. El aumento del frío en buena parte de Europa activa la demanda justo en el comienzo de la segunda parte de la campaña de la naranja, y en estos momentos se registra una tendencia al alza en los precios.
El secretario general de la Unió, Carles Peris, indica que una de las variedades más comunes en esta época, la hernandina, «se cotiza hasta los 42 céntimos por kilo», unas cifras similares a las que proporciona el presidente de Fepac-Asaja, José Vicente Guinot, quien valora «una mejora en los precios». Incluso desde algunas cooperativas afirman a Mediterráneo que algunos tratos se han cerrado «a 45 céntimos», destacan.
Los datos oficiales que difunden periódicamente desde la Conselleria de Agricultura exponen que la semana pasada la cotización no pasó de los 39. Por tanto, el aumento de precios se cifra hasta en un 15% en tan solo una semana. Otra variedad que ha ido al alza es la tango, que de 60 céntimos pasa a una horquilla de 65 a 72, mientras que la sando se compra ahora entre 40 y 50.
Una vez más se cumple el tópico de que la caída de los termómetros favorece al interés por consumir cítricos en numerosas partes de Europa, y ello tiene un efecto en los pedidos a Castellón. «El frío activa las operaciones de compra», comenta el presidente de Asaja. «Las temperaturas bajas animan el mercado», afirma el líder de la Unió. Con la fortuna añadida de que de las comunidades productoras de agrios, «la valenciana ha sido la que menos problemas ha tenido con el temporal» «Hay más aprovechamiento y más fruta de buena calidad», dice.
BENEFICIOS
A pesar de este panorama, el agricultor no obtiene un rendimiento tan grande como el que logran otras partes implicadas en este negocio. «Es el momento de insistir en la necesidad de que, además de una ley de cadena alimentaria, se generen los mecanismos que permitan su cumplimiento», concluye Guinot.