C on un presupuesto de 3,3 millones de euros , el Ayuntamiento de Castelló confirmó ayer el inicio de las obras para crear el Centro de Envejecimiento Activo y Saludable de la capital de la Plana, que ocupará una reformada y adecuada Casa de la Cultura.

El plazo de ejecución del proyecto, cofinanciado con fondos municipales y europeos, es de 18 meses, durante los cuales aspiran a crear «unas instalaciones pioneras», según expusieron ayer desde el Ayuntamiento, donde informaron de que el acta de inicio de los trabajos se firmó el jueves pasado.

Sobre lo que significa este momento para la ciudad, la alcaldesa, Amparo Marco, remarcó que «plasma con hechos la apuesta por situar a las personas mayores en el eje de las políticas de bienestar, los servicios y el urbanismo».

Y es que entre las funciones que se han establecido para esta nueva infraestructura se incluye la «optimización de las oportunidades de salud, participación social y seguridad», principios defendidos desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que el Ayuntamiento asume como propios «para garantizar el denominado envejecimiento activo».

La empresa adjudicataria empezará a desarrollar su misión esta semana «con el desvío de una línea eléctrica aérea en la cubierta del edificio que invade el inmueble y condiciona el derribo», detallaron desde el consistorio. Cuando concluya esta tarea --que durará varios días-- empezará a verse movimiento de maquinaria pesada para proceder al derribo.

En la planificación presentada por la constructora, es reseñable, a efectos de la ciudadanía y las molestias que esta intervención pueden generar, que el 25 de enero está previsto cortar la circulación de vehículos por las calles Enmedio y Antonio Maura, y ocasionalmente en Isabel Ferrer. Desde el Ayuntamiento advierten que «hasta que concluya la demolición y estructura, la afección de la movilidad será continua en Antonio Maura». Por lo que respecta a la calle Enmedio, «al tratarse de un vial más amplio, el corte completo será menos frecuente».

El derribo solo afectará a la parte interior del inmueble, pues está protegido, por lo que las fachadas conservaran su estructura original y su particular distribución en edificaciones independientes. H