Es una tragedia sin paliativos. Las cifras constatan el nivel del drama de la pandemia y encierran dramas personales inimaginables hace menos de un año. La provincia de Castellón ha superado el medio millar de fallecidos por coronavirus. En concreto, ayer con siete nuevos decesos el dato se elevó a 505. La crudeza de esta tercera ola se refleja en el goteo constante de fallecidos, que se ha acelerado en el último mes, cuando han muerto cerca de 150 castellonenses. Del total de fallecidos, más de 170 de ellos eran usuarios de residencias.

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El grupo de edad más golpeado por el covid-19 ha sido el de las personas entre 80 y 89 años, afectando más a los hombres que las mujeres. De todos modos, la letalidad del virus también golpea a los jóvenes, teniendo en cuenta que, en la Comunitat, han muerto 14 personas entre los 10 y los 39 años desde el pasado mes de marzo. Con los números que facilita la Conselleria de Sanidad a diario se extrae que el 1,9% de las personas que se han contagiado en la provincia han perecido. Un dato que se sitúa por debajo de la media nacional que está en un 2,2%, pero algo superior a la letalidad en la Comunitat que se sitúa en 1,77%, según afirmó ayer la propia consellera de Sanidad, Ana Barceló.

La crudeza de la pandemia ha dejado en la provincia de Castellón una variación de defunciones del 6,32%, es decir, el año pasado murieron 332 castellonenses más que en el 2019. Según datos actualizados del Instituto Nacional de Estadística (INE), el año pasado fallecieron en la provincia 5.587 personas frente a las 5.255 defunciones del pasado ejercicio. Este porcentaje de la variación es más del doble en la Comunitat que en Castellón al estar en un 13,13%, mientras que a nivel nacional marca un 20,45%.

Testimonio

Sin duda, uno de los dramas de la pandemia es la casi imposibilidad de las familias de despedirse de los suyos y abrir un uelo sin apenas poder haber dicho adiós. Uno de esos familiares que llora estos días a un ser querido es Paloma Nácher, quien perdió a su padre Paco el viernes por covid a los 79 años. Paloma ha expresado en una carta su «orgullo» por la sanidad pública y su gratitud por el trabajo del personal del Hospital General de Castelló.