La última cuesta de enero ha sido la más empinada para el sector de la automoción de Castellón. Y eso que en los concesionarios ya se lo temían. La subida del impuesto de matriculación, que entró en vigor el pasado día 1 y que en la práctica supone un alza del 5% sobre el precio medio de un coche, ha hundido todavía más las matriculaciones de automóviles en la provincia y los primeros datos auguran un arranque de año para olvidar. Durante las tres primeras semanas de enero, y según datos de la Asociación de Talleres Reparadores de Automóviles y Otros de Castellón (Astrauto), tan solo se matricularon 297 turismos y todoterrenos, un 70,1% menos que en el mismo mes del 2019. El problema es que llueva sobre mojado, ya que Castellón cerró el 2020 con un descenso en las ventas del 52%.

Las tres primeras semanas del año han sido nefastas y en la provincia hay marcas de automóviles que han vendido cero coches. La nueva normativa de emisiones (WLPT), en la práctica, supone que un alto porcentaje de los modelos de automóviles que se venden en Castellón salten de tramo el impuesto de matriculación y paguen una media de 800 euros más. Y eso está contribuyendo a desacelerar todavía más un mercado ya de por sí deprimido. «En una situación excepcional como la que está provocado la pandemia, los consumidores necesitan de incentivos para seguir con la necesaria renovación del parque. Sin embargo, en lugar de incentivar se les penaliza con una subida media del 5% en el precio de los vehículos, lo que retrasa esa renovación al retraer la demanda; por no hablar del impacto negativo sobre el desarrollo económico y empleo», dice Tania Puche, directora de comunicación de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (Ganvam). En el conjunto nacional, el descenso en las ventas hasta el 24 de enero ha sido del 56,8%, trece puntos menos que en Castellón.

Las ventas de coches no levantan cabeza pero no toda la culpa la tiene el alza del impuesto de matriculación. El principal responsable de los malos datos se llama covid-19. «Tras las últimas medidas que han entrado en vigor en la Comunitat Valenciana, los concesionarios estamos obligados a cerrar a las 18.00 horas. Además, con la hostelería cerrada, hay muchos profesionales que no trabajan y los datos de esta tercera ola están provocando que muchísimas personas vayan de casa al trabajo y aplacen cualquier decisión de compra que no sea urgente», describe Pepe Cortes, gerente del concesionario Cobelsa de Castelló y miembro de la patronal provincial Astrauto.

Incertidumbre económica, miedo al contagio en un momento en el que la transmisión está fuera de control, llamadas al autoconfinamiento... la consecuencia son concesionarios vacíos. «El tráfico de clientes en las exposiciones es muy bajo y eso ha motivado que haya trabajadores que han cogido vacaciones porque no hay trabajo», apunta Cortes. Pero los números negativos no solo afectan a las ventas de automóviles. También tocan de lleno a otra de las patas del negocio del sector: los talleres de reparación. «La movilidad se ha restringido y han caído las revisiones. Y al haber menos coches circulando también hay menos accidentes, menos golpes de chapa y eso se traduce en menos trabajo para los talleres de los concesionarios», argumenta.

El zarpazo del covid, el alza del impuesto de matriculación y el fin del plan Renove dejan al sector de la automoción en una situación delicada. Y el freno en el ritmo de vacunaciones han enfriado las expectativas de todos los que pensaban que el primer semestre de este año las matriculaciones podrían dejar atrás los números negativos. «Hasta el segundo semestre del año no veamos un cambio de tendencia, cuando el impacto de la vacuna en la confianza del consumidor y el fin de las restricciones de movilidad, generen un entorno de menor incertidumbre», asevera Tania Puche.

En la asociación Faconauto son todavía más pesimistas. «La automoción se enfrenta a un ejercicio con muchas incertidumbres donde, con toda seguridad, la demanda caerá, lo que nos lleva a pensar que hasta 2022 no se podrá hablar de recuperación», aseguran.