Un total de 18.101 vacunas contra el coronavirus ha puesto la Conselleria de Sanitat en la provincia de Castellón en las últimas cinco semanas desde que se inició la campaña. De estas, ya han recibido la segunda dosis 4.033 castellonenses, que pronto podrán ser inmunes frente al virus. Tras semanas sin ofrecer cifras al respecto, ayer el departamento de Ana Barceló informó sobre los números referidos a la provincia, que ponen de manifiesto varias circunstancias. Por un lado, que en total han sido vacunadas 14.300 personas entre residentes, personal sociosanitario y sanitarios, lo que supondría que una gran mayoría de personas integradas en ambos colectivos de riesgo ya habrían recibido el inyectable en la provincia, aunque todavía faltaría un porcentaje para completar esta primera fase.
Por otro lado, que Castellón solo habría puesto una parte de las dosis que debía haber recibido, unas 30.000 si los envíos semanales suponen 5.000 dosis de Pfizer para Castellón, como en diversas ocasiones se ha informado desde Sanitat. De todos modos, hace 15 días hubo un problema de suministro por parte de la compañía que afectó al envío, lo que obligó a la Conselleria a replantear la campaña para asegurar la segunda dosis, frenando la inoculación de nuevas personas.
En la Comunitat, se han administrado hasta el momento 136.632 dosis, habiendo recibido las dos inyecciones 34.094 personas. El propio presidente de la Generalitat, Ximo Puig, aseguró el domingo que a finales de esta semana se habrá superado la cifra de 50.000 personas vacunadas con toda la pauta clínica.
Previsiones
Y es que está previsto administrar unas 51.000 vacunas, lo que se podrá cubrir con las previsiones de llegada de ayer de 32.700 vacunas de Pfizer y de 4.200 vacunas de Moderna, a las que hay que sumar el estoc que se había reservado para garantizar las segundas dosis.
Serán estas de Moderna, según informó la consellera de Sanitat, Ana Barceló, en Les Corts, las que permitirán completarla vacunación en las residencias que faltan debido a que tenían brotes activos durante la campaña, así como al personal de la sanidad privada. Y es que es grande el malestar existente por el retraso entre el personal que trabaja en hospitales y clínicas privadas.
Falta de suministro
El principal problema al que se enfrenta el plan diseñado es la falta de suministro por los continuos problemas con las farmacéuticas. A pesar de todos estos inconvenientes, hay todavía tiempo para poder completar con éxito el primer paso que era haber vacunado en marzo a residencias, sanitarios y grandes dependientes. Es este último el siguiente grupo a inmunizar. En la provincia hay cerca de 8.000 personas dependientes de grado II y grado III, aunque algunas de ellas ya han sido vacunadas al estar en residencias.
Críticas
Son las residencias las que llevan días alzando la voz y reclamando que se cumpla el orden establecido en la campaña de vacunación. La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios de Atención a la Dependencia de la Comunitat Valenciana (Aerte) reclamó a la consellera de Sanitat, que se termine el proceso de vacunación en residencias ya que faltan más de 6.000 personas por recibir la primera dosis de la vacuna contra la covid, según sus cifras.
Según el presidente de la patronal, José María Toro, las personas que se encuentran en centros que registraron brotes de covid-19 en momentos previos o durante la campaña de vacunación, empezaron a ser vacunadas a partir de la semana del 11 de enero pero, a partir del día 18, se comenzaron a suspender «sin fecha» las administraciones de las primeras dosis en estos centros. Además, reclama cumplir el orden d el plan y priorizar el suministro para inmunizar a los geriátricos antes de administrar segundas dosis al personal sanitario, ya que el plazo de 21 días puede alargarse hasta 42, según las pautas clínicas.
De todos modos, a nivel general, el ritmo es lento y, sino llegan más vacunas, será imposible poder inmunizar al 70% de la población antes del verano, como planteó el Gobierno central.
