La huelga convocada para este jueves por el Sindicato de Estudiantes tuvo un seguimiento desigual en la provincia de Castellón. Mientras en algunos centros de Secundaria se situó en torno al 80%, en otros no fue secundada. Los alumnos habían convocado el paro para reclamar un plan de choque para contener la tercera ola del covid.

José Víctor Arnau Ferre, miembro del consejo escolar y presidente de los delegados del IES Leopoldo Querol de Vinaròs, explicó que en su centro fue un éxito total la convocatoria. «Somos 900 alumnos y de esos, unos 500 han secundado la huelga», señaló. Desde la dirección del instituto cifraron en un 70% el porcentaje de seguimiento, de entre aquellos que tenían derecho a hacerla, que era a partir de los 14 años.

Mientras, en el IES Llombai de Burriana calcularon que el 60% del estudiantado la había seguido, sobre todo en Bachillerato y ciclos formativos. En el Matilde Salvador de Castelló, de tercero de la ESO en adelante hubo grupos enteros que no asistieron, aunque muchos alumnos de Bachillerato y 2º de ciclos sí acudieron a clase, debido a que acaban antes el curso, siendo superior en 3º y 4º de ESO y 1º de ciclos.

En el IES Coromines de Benicarló, la asistencia fue la de un día normal y en el IES Benigasló de la Vall, en cambio, indicaron que «como no lo convocaron no ha habido», indicó la directora.

La Conselleria no tuvo constancia de ninguna incidencia. Según fuentes del departamento que dirige Vicent Marzà, los alumnos a partir de 3º de ESO pueden faltar a clase presentando una autorización paterna o materna cinco días antes de la jornada, para que no se considere falta injustificada.

En toda la Comunitat más de 60 centros (nueve de Castellón), según el Sindicato de Estudiantes, reclamaron unas aulas seguras.

Arnau señaló que pretenden transmitir tanto al Gobierno central como al autonómico que las medidas que está tomando a nivel educativo y sanitario no son eficaces ni dignas. «No se puede entender que en marzo hubiera un confinamiento para parar la primera ola y que después tengamos que volver a una situación como la que estamos viviendo en la tercera, con un aumento superior incluso a los casos de marzo y con el varapalo bestial de muertes», dijo. Y recordó que la Comunitat tiene las incidencias más altas del país.

De ahí que el Sindicato de Estudiantes reclame un confinamiento domiciliario que pueda rebajar la ola, así como la paralización de la actividad lectiva y productiva no esencial para proteger la salud de la población, además de permisos retribuidos a todos los trabajadores para poder garantizar la conciliación familiar.

También demandan la cancelación de todos los exámenes y su sustitución por otras formas de evaluación, así como un plan de choque en la educación pública invirtiendo en recursos materiales y humanos para tener un sistema decente. «No se puede jugar más con la educación y nuestro futuro», aseveró el portavoz estudiantil, quien considera que no tiene sentido que limiten las reuniones a más de dos y cuatro personas en España y luego hagan exámenes en las universidades de más de 50 en una misma sala.

PROTOCOLOS / «En el IES Leopoldo Querol estamos agradecidos de que tanto la dirección como los profesores se estén encargando de un buen mantenimiento de las medidas de seguridad y del protocolo, pero lo que reclamamos es una mejora por parte de las conselleries de Sanidad y Educación de los centros para estos cumplimientos», aseguró el portavoz .

Por ejemplo, «se dijo que las ratios deberían ser de 25 a 20 y no se cumplen, y en cada comunidad se aplican unas diferentes», puntualizó. Mostró su preocupación por la masificación que pueda producirse en las pruebas de acceso a la universidad y pidió que se respeten las distancias.