El presupuesto municipal del Ayuntamiento de Castelló para el 2021, lejos de aprobarse próximamente y con visos de no entrar en vigor hasta mediados de año, vuelve a generar polémica al dejar en evidencia, tanto el PSPV como Compromís, el poco peso de Ciudadanos (Cs) en las cuentas no cediendo, los primeros, a las pretensiones de la formación naranja de obtener las cuentas para su análisis antes de decidir si darles su apoyo.

La negativa de los socialistas a entregarle al partido naranja el documento económico para que puedan estudiado, tal y como el equipo de Marín-Buck demanda ya que su apoyo «no será un cheque en blanco», ha soliviantado a Cs en el consistorio. Los concejales naranja han decidido no acudir a la reunión que tenían prevista para mañana con los socialistas tras el ultimátum lanzado el pasado martes por los naranja al equipo Amparo Marco.

De hecho, el propio portavoz del grupo municipal de Cs, Alejandro Marín-Buck, le mostró su malestar a la propia primera edila sobre el hecho de no poder tener las cuentas municipales en su haber a partir de mañana para poder estudiarlas y concretar su apoyo al presupuesto que regirá las inversiones y los gastos de Castelló. Una negativa que llega después de cinco reuniones entre Marín-Buck y el concejal de Hacienda de la capital, David Donate. 

También sobre este encontronazo entre las formaciones naranja y socialistas se pronunció el grupo de Compromís. Fuentes nacionalistas afirmaron a este diario que no entendían «el retraso que está causando la intervención de Cs. No puede ser que estas estrategias dejen a Castelló sin presupuesto y, muchos menos, en un año tan importante para marcar la recuperación económica como es el 2021». Las mismas fuentes reclamaron «todos los esfuerzos para solucionar los capítulos pendientes porque es urgente cerrarlo y aprobarlo». 

Cs duda si apoyar las cuentas

«No iremos a la reunión prevista con los socialistas porque si no nos van a dar el documento no podemos perder más el tiempo», afirmaron fuentes de Cs en el Ayuntamiento de Castelló, quienes no quisieron desvelar si finalmente, y pese a no disponer aún de la documentación, darán su voto positivo a unas cuentas municipales que ascenderán a alrededor de 190 millones de euros para este año y que estarán destinadas, principalmente y de nuevo, a luchar contra la pandemia .

La respuesta por parte del PSPV no se dejó esperar y fuentes socialistas argumentaron que su grupo municipal «ha aceptado la práctica totalidad de las quince propuestas que presentó Ciudadanos y que inciden en el carácter social de las partidas».

«Ahora, es el equipo de Ciudadanos en el consistorio el que debe sopesar si apoyar o no el presupuesto para este año», prosiguieron las mismas fuentes socialistas al periódico Mediterráneo.