Las cámaras de videovigilancia que el Ayuntamiento de Castelló activó a principios de año para controlar el acceso de vehículos al centro de la ciudad y a través de las que empezó a multar a los que no estaban autorizados desde el 16 de febrero han disminuido el paso de estos por el caso histórico en un casi un 20%. Hay que recordar que, debido a las múltiples quejas, el consistorio ha apagado ahora dichas cámaras y devolverá las multas impuestas, cada una de ellas de 200 euros.

Según datos oficiales del Ayuntamiento de Castelló a los que ha tenido acceso el periódico Mediterráneo, la media diaria de vehículos que entraba en el centro era de 3.760 durante el primer mes y medio de este año, detectados por las cámaras ya instaladas. Aunque en este tiempo el consistorio no multó a los que no estaban autorizados, sí que remitió un total de 4.000 cartas informativas durante este periodo de avisos. La cantidad de vehículos diaria bajó hasta los 3.012 al día desde el 16 de febrero hasta el 31 de marzo (últimos datos de los que se dispone debido al hackeo que sufrió el Ayuntamiento el 31 de marzo).

Estas cifras ponen de manifiesto que la instalación de esta vigilancia ha sido una medida eficaz en cuanto al objetivo del Ayuntamiento de Castelló, que era disminuir la circulación por la zona centro con el fin de que hubiera menos CO2 en la atmósfera y devolver el casco urbano al peatón. Sin embargo, estos datos también certifican la lectura que ha realizado durante estos días el sector comercial basada en que entraban menos vehículos, lo que motivaba, según los comerciantes, un descenso en las ventas, principalmente en los potenciales clientes de los pueblos de la provincia.

En cuanto a las sanciones, desde el consistorio de la capital de La Plana reconocen ser conscientes de que se ha producido un incremento del número de denuncias en la zona vigilada por las videocámaras estando contabilizadas alrededor de las 7.000. Esta cantidad puede ser elevada porque el ciberataque ha afectado al sistema informático que las contabilizada. Este aumento de sanciones ha conllevado más alegaciones, la inmensa mayoría de estas son de personas autorizadas a circular por la zona centro pero que no habían renovado su autorización. estas argumentan que, como en los últimos tiempos prácticamente no había ningún impedimiento para el acceso a la zona centro, no habían renovado el permiso. También se han quejado de que no se había enterado del cambio del sistema de vigilancia.