El Ayuntamiento de Castelló negociará con la Generalitat valenciana un espacio en el nuevo edificio de Borrull «cuando finalicen las obras de remodelación» del recinto, tal y como afirmó ayer el portavoz del equipo de gobierno, José Luis López. En un principio, el compromiso entre ambas administraciones era compartir el recinto de la plaza Borrull entre ambas administraciones pero el hecho de que finalmente haya sido el Consell el que haya asumido el coste total de la remodelación del proyecto (12 millones de euros) ha motivado que, finalmente y por el momento, sea la Conselleria de Políticas Inclusivas y de Igualdad la que disponga de las instalaciones para ofrecer sus servicios sociales. «En cualquier caso, lo más importante es recuperar el edificio y ponerlo al servicio de la ciudadanía así como que el uso sea lo más social posible», destacó el portavoz José Luis López.

‘Hackeo' y contratos

Por otra parte, el socialista defendió, en su comparecencia ante los medios de comunicación, que el Ayuntamiento de Castelló contaba con alta protección de su sistema informático antes del ciberataque después de que la Sindicatura de Comptes de 2019 alertara de que este se podía mejorar. El portavoz municipal insistió en que el consistorio «cumplía con todos los parámetros de protección incluso algunos de ellos por encima de las recomendaciones de las autoridades competentes en sistemas de protección».

La Marjaleria

López también lamentó la polémica situación generada en el pasado pleno por parte del concejal de Cs Vicente Vidal después de que el propio López le dijera a la portavoz del PP, Begoña Carrasco, que «tenía la cara dura» y confió en que «no se vuelva a repetir». En cuanto a la visita del ministro de Cultura y Deportes a la capital de la Plana para interesarse por las obras del Archivo Histórico Provincial, López mostró su satisfacción y valoró el «liderazgo de Castelló en Madrid». 

El portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló, José Luis López, afirmó ayer, con respecto a las quejas de los vecinos de la Marjaleria por la rotura del colector que el consistorio todavía no ha arreglado después de dos años que este sistema de desecación se rompió porque se construyeron «viviendas ilegales sobre este». Representantes de las más de 300 familias afectadas por esta situación que impide desecar la zona cuando llueve y genera grandes bolsas de agua que atraen a los mosquitos, principalmente en el verano, se reunieron con el PP para reivindicar soluciones, al igual que lo han hecho con la teniente de alcalde del Grau, Mary Carmen Ribera, y con el concejal de Transición Ecológica, Fernando Navarro. López explicó que desde el equipo de gobierno trabajan «de forma conjunta con los vecinos y con el Coto Arrocero para encontrar una solución entre todos, una vez localizado el problema». Entre los posibles arreglos destacan la ejecución de un baypass en el colector o analizar la conveniencia de colocar una bomba para sacar el agua que se estanca en la zona de la Marjaleria.