El 29 de junio es Sant Pere y el Ayuntamiento de Castelló decidirá en breve si se permite algún tipo de celebración en el Grao. El consistorio se reunirá «en los próximos días» con representantes del món de la festa para abordar el calendario festivo de lo que queda de año. En el horizonte asoman las fiestas del distrito marítimo, que ya se suspendieron el año pasado por la pandemia del covid y que en este, en caso de que la evolución de la misma lo permita, podría albergar algún tipo de acto, siempre cumpliendo la normativa de la Conselleria de Sanitat, que a día de hoy propone no permitir las celebraciones con aglomeraciones hasta el próximo mes de septiembre.

«La prudencia y la salud de las personas es lo principal», aseguró ayer Omar Braina, el edil de Fiestas de la capital de la Plana. En el pasado mes de enero, el consistorio decidió junto a los representantes del món de la festa suspender todo el calendario festivo de la ciudad hasta el mes de mayo. Ahora, las partes implicadas se sentarán de nuevo «en breve» para «evaluar qué podemos hacer» siempre «sin poner en riesgo el enorme esfuerzo de la ciudadanía de Castelló», en palabras del concejal.

Uno de los aspectos a decidir con más premura es el relativo a las fiestas de Sant Pere en el Grao, puesto que deberían dar comienzo a finales del próximo mes. En principio, las fuentes consultadas ven muy complicado la celebración de actos masivos, pero no se descarta por el momento otro tipo de evento que pueda seguir las recomendaciones sanitarias.

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Lo que sí está descartado por el Ayuntamiento es la celebración de las fiestas de la Magdalena a partir de septiembre. «La próxima será en marzo del 2022», aseguró tajante Braina, que además de edil preside el patronato de Fiestas, cuyo consejo rector se reúne hoy. Está por decidir, en todo caso, que en el marco de las fiestas fundacionales, en torno al 8 de septiembre, se pueda incluir algún tipo de acto con representación y guiño a la Magdalena.

Cabe apuntar que esta misma semana Sanitat fijó en un comunicado el 1 de septiembre como inicio de los festejos populares en la Comunitat. Conselleria considera esperar a septiembre para estas celebraciones «garantiza un margen de tiempo importante y más posibilidades de controlar la pandemia», ya que los meses que quedan hasta entonces servirán para aumentar la vacunación contra el coronavirus «y llegar mucho más protegidos», según Sanitat. Pese a ello, varios ayuntamientos provinciales han mostrado su voluntad de organizar celebraciones.