Las dependencias de la Cámara Agraria fueron el escenario de la primera junta general ordinaria del Comité de Regantes de Castelló, en el que además de hacer balance de las actividades del pasado año y aprobar el presupuesto para el presente se puso de manifiesto que habrá cambios en la presidencia. José Pascual, que ha llevado las riendas de la institución durante tres décadas, anunció que no se presentará a la reelección, por lo que será en el mes de octubre cuando se lleve a cabo el proceso que designe a su sucesor. 

Según mencionó el todavía presidente, «agotaré el mandado, y entre los 13 integrantes de la junta, que son los 12 de la comunidad más el concejal de Agricultura, se hará la elección del nuevo presidente». Se podrán presentar candidaturas, aunque tiene números para asumir esta función el actual presidente del Sindicato de Riegos, Pepe Cueva. Además de la renovación de parte de la junta, José Pascual destacó el deseo «de poder incorporar a alguna mujer, algo que nunca ha pasado hasta ahora» en una institución castellonense más que centenaria.

Canon

Por otro lado, se estableció que se mantendrá el mismo canon de pago por el uso de agua. «Estará en los nueve céntimos por metro cúbico», comentó José Pascual. Las lluvias de los últimos meses alejan del fantasma de restricciones y sequía durante un tiempo.

En cuanto al desarrollo de la asamblea, la primera desde el inicio de la pandemia, incluyó en el orden del día el presupuesto para el presente año. «Las cuentas consolidadas ascienden a los 13 millones de euros, que son el presupuesto consolidado, que incluye tanto el coste de las instalaciones como el coste de las actividades». Los gastos fueron de 1,5 millones de euros.

Entre las preocupaciones del colectivo está el efecto que pueda tener la subida del precio de la electricidad, y también factores ya estructurales como el progresivo abandono de una actividad que forma parte del pasado de Castelló. Tal y como indicó José Pascual recientemente, en el comienzo de la década de los 90 eran unas 36.000 las hanegadas de cultivo en el término municipal, mientras que en la actualidad apenas llegan a 12.000. El crecimiento de los usos urbanos en varias zonas de la ciudad también han tenido su influencia.

Además, los mecanismos de riego por goteo, que comenzaron a implantarse de manera masiva hace más de un cuarto de siglo, han tenido un efecto positivo, al reducir hasta en una tercera parte el aporte hídrico en los campos de cultivo.

La reunión se desarrolló con el cumplimiento de medidas de distancia social entre los asistentes, como marca la normativa vigente.