La cruz del parque Ribalta, que en la actualidad se encuentra en pleno proceso para ver si se retira de esta zona en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica y tal y como pretende la concejalía de Memoria Histórica y la conselleria de esta misma área, ha amanecido con pintadas "antidemocráticas". En la imagen que acompaña a la información pueden contemplarse escritos como O la tombeu O la tombem y Castelló antifa, así como diversos símbolos.
El monumento sigue en pie hasta que la juez se pronuncie sobre el proceso de retirada ya que la Asociación Abogados Cristianos acudió a los tribunales ante la decisión institucional de quitar la cruz. Pidió cuatelarísimas aunque la jueza lo dejó en cautelares. Está previsto que dicte su decisión en las próximas semanas.
La retirada de la cruz ha recibido más de un centenar de alegaciones, la mayoría de ellas a favor de que se retire de su actual ubicación, por lo que la concejalía de Memoria Democrática que dirige Verònica Ruiz, de Compromís, mantuvo una reunión con el obispado y esta institución religiosa se hará cargo de la cruz en el caso de que se quite definitivamente.
Denuncia
Con respecto a la aparición de estas pintadas, Vox en el Ayuntamiento de Castelló ha acusado este miércoles a la "extrema izquierda radical y comunista de ser ellos los fascistas" y considera que la pintada aparecida es un "acto antidemocrático". "Es curioso que aquellos que nos acusan de fascistas ejerzan el fascismo más absoluto alentando a saltarse la ley y todos los procedimientos administrativos que siguen actualmente su curso de manera democrática".
Borradas
Finalmente, en cuanto el Ayuntamiento de Castelló ha tenido constancia de la existencia de estas pintadas, ha procedido a borrarlas.
