El Ayuntamiento de Castelló desgranó ayer nuevos detalles del esperado Plan General de Castelló, que está llamado a poner fin a una década de inseguridad urbanística en la capital de la Plana. El equipo de gobierno valoró el «crecimiento racional» del suelo urbanizable, que cifró en 4,4 millones de metros cuadrados, repartidos en 1,3 para suelo residencial, 2,1 en industrial, 579.000 en terciario y 423.000 en red primaria adscrita.

La alcaldesa Amparo Marco explicó al respecto que este nuevo ordenamiento «plantea un uso racional del suelo, que concilia las necesidades sociales y económicas de la población actual y futura con la conservación y la mejora de sus recursos naturales y sus valores ambientales y patrimoniales». La primera edil subrayó dos hitos del Plan General de Castelló, que propugna un «modelo de ciudad que plantea un crecimiento residencial que cohesiona la ciudad e integra los grupos periféricos» y «un desarrollo realista para las actividades económicas».

Los sectores

El edil de Urbanismo, José Luis López, detalló el número y la ubicación de los sectores: son doce residenciales, siete industriales y seis terciarios. Los residenciales son Río Seco, Censal, Tombatossals, Río de la Plata, Enrique Gimeno, Camp de Morvedre, Cremor, Morterás-Cubos, Saboner, Salera, Mérida y La Joquera. Se estima un número de viviendas máximo de 8.269. 

Respecto al suelo industrial, los sectores son La Pedrera, Català, Giner, Pi Gros, Avenida Valencia, Plataforma Logística y Carretera Grau-Almassora. Y el suelo urbanizable terciario está localizado en Estepar, Lourdes, Hermanos Bou, Avenida del Mar, Almazán y Cassanya. En cuanto a la superficie de red primaria adscrita a los distintos sectores de suelo urbanizable, se ubica en los entornos de los parques Almalafa, Senillar y Bovalar, Fernando el Católico, Hospital General, Chencho, Serrallo y Molí la Font. 

El segundo teniente de alcaldía Ignasi Garcia, valoró al respecto que el Plan «nos permitirá vertebrar la ciudad y coser los barrios para construir una ciudad de derechos y de oportunidades, priorizando el bienestar de las familias». El tercer teniente de alcaldía, Fernando Navarro, añadió que el ordenamiento «atiende a las necesidades de la ciudadanía y la economía real, y no solo de unos pocos».