Las obras de remodelación del camí la Ratlla comenzarán este mismo mes, tal y como confirmó ayer el concejal de Urbanismo y Obras, José Luis López, al periódico Mediterráneo. Pese a que estos trabajos se adjudicaron a la empresa Becsa en UTE con Industrial de Energía y Tecnología S L el pasado mes de abril, y después de hablar con la constructora, el consistorio decidió que estas tareas se iniciarían después de los meses de julio y agosto, con el fin de evitar el posible caos de tráfico que se podría ocasionar en esta carretera, entre los término municipales de Castelló y Benicàssim, muy transitada en la temporada estival.

Los trabajos urbanísticos están valorados en 1,1 millones de euros (50% lo paga el Ayuntamiento de Castelló y la otra mitad corre a cargo de los planes Feder) y tienen un plazo de ejecución de diez meses. «Se trata de hacer un bulevar que resulte más accesible y seguro, tanto para los viandantes como para los conductores, y su apertura permitirá reducir, al menos en un 5%, las emisiones de CO2 cumpliendo así con un requisito europeo», destacó el concejal López. La actuación está estructurada en dos ejes. El primero de ellos enlaza la carretera CV-149 hasta el camino del Serradal, que suma un total de 1.366,3 metros y en este tramo se creará una zona de paseo, un itinerario cicloturista y la adecuación de la carretera. Habrá otros 300 metros en el que se concentrará el recorrido para los peatones para completar la conexión de la acera existente en la zona que ya está urbanizada. La superficie afectada es de casi 17.000 metros cuadrados.

Infografía de cómo quedará el camí la Ratlla, entre Castelló y Benicàssim, cuyas obras comenzarán este mes.

MEJORAS URBANAS

La remodelación del camí la Ratlla, que contribuirá a hacer un entorno más amable junto a la Marjaleria de Castelló, se suma a la del camí la Plana, ya finalizada, en la misma zona y siguiendo el patrón similar. Aceras para el paseo, más zona verde y mejores viales. Además, Castelló seguirá con las mejoras urbanas con la rehabilitación de la avenida de Lledó que también ha sido adjudicada a Becsa (en esta ocasión en UTE con Telecso), y cuyas obras están previstas que comiencen durante el último trimestre de este mismo año.

Hay que recordar que estos tres proyectos se sufragan con fondos europeos, en lo que se ha convertido en una práctica habitual en el Ayuntamiento de Castelló, porque optar a estas ayudas permite al municipio ahorrar el 50% de este tipo de trabajos urbanísticos que suponen mejoras para la ciudad y calidad de vida de los vecinos de la capital de la Plana.