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EN BASE A LA LEY DE MEMORIA HISTÓRICA DEL 2007 DE RODRÍGUEZ ZAPATERO

La Conselleria abre la puerta a las excepciones con calles franquistas en Castelló

Los familiares de Ángel Sánchez Gozalbo y Manuel Segarra Ribés presentan alegaciones

Calle dedicada al creador del Pregó, Manuel Segarra Ribés, en la localidad de Castelló.

La Conselleria de Calidad Democrática abre la puerta a hacer excepciones con los nombres de calles franquistas en base a la ley de Memoria Histórica del 2007 de Rodríguez Zapatero a la que podrían acogerse personajes relevantes y queridos de Castelló por su vinculación social o cultural a la ciudad como sería el caso, por ejemplo, de Ángel Sánchez Gozalbo o Manuel Segarra Ribés y que conduciría a la conservación del vial.

Precisamente los familiares de ambos castellonenses, médico y fundador de la Sociedad Castellonense de Cultura y creador del Pregó, respectivamente, han presentado alegaciones al Catálogo de Vestigios Franquistas y de la Guerra Civil cuya inclusión conllevaría, a día de hoy, la retirada de su nombre de la calle que el consistorio les dedicó.

Propuesta

A estas dos alegaciones se sumará la que el Ayuntamiento de Castelló tiene previsto presentar y, sobre la que ya trabaja. En líneas generales, plantearía eliminar los nombres de las calles Santos Vivanco, Fabra Andrés y la plaza Herrero Tejedor y autorizaría que permanecieran las dedicadas a Manuel Segarra Ribés y el doctor José Clarà, tal y como recogió ayer este diario. 

A este respecto, la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, explicó que la concejala de Memoria Democrática, Verònica Ruiz, que tiene delegadas las competencias de la primera edila en esta área municipal, ha realizado una propuesta que estudiarán. Hay que recordar que, pese al alegato que pueda presentar el municipio ante Calidad Democrática, es el Ayuntamiento de Castelló el que tiene la competencia exclusiva para quitar o poner el nombre de las calles en la capital. De esta forma, en el caso de que alguno de ellos se tenga que quitar a partir del próximo año y el consistorio no lo haga, entonces la Conselleria podría demandarlo por incumplimiento de la ley de Memoria Histórica.

Así las cosas, el Acord de Fadrell dispone de un plazo de mes y medio, hasta diciembre, para presentar esta alegación porque a partir de enero, la Conselleria de Calidad Democrática comenzará a remitir requerimientos a los ayuntamientos que no hayan presentado argumentaciones al respecto. En el documento, la administración autonómica le instaría a retirar los vestigios franquistas que se encuentran en dicho catálogo en un periodo comprendido entre los siguientes cuatro meses.

Comité de expertos

Dichas alegaciones serán estudiadas por un Comité de Expertos, que determinará si se admiten o no.

Desde la Conselleria de Calidad Democrática que dirige Rosa Pérez Garijo, de EUPV, recordaron a este diario que el informe con las calles dedicadas a personajes «franquistas» para incluirse en el catálogo fue remitido por la concejalía de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Castelló, si bien ahora el Acord de Fadrell presentará alegaciones para que esta lista sea modificada. 

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