En todas las ciudades españolas encontramos topónimos arraigados en la cultura popular. Tanto que se trata de lugares mucho más conocidos por su denominación 'alternativa' que por la oficial. Castelló no es una excepción y en la capital de la provincia muchas veces nos referimos a puntos emblemáticos con el nomenclátor de varias décadas atrás, y no con la denominación que actualmente ostentan en el callejero.
Hagamos un repaso por algunos de estos lugares que pese a ser rebautizados en su momento se han quedado con el nombre con el que fueron conocidos en su día por los castelloneros de soca.
Carrer de la Vieta
Muchos habitantes de la capital tendrían problemas para dar indicaciones si algún visitante les pregunta por la localización de la calle Escultor Viciano -dedicada al artista nacido en Castelló en 1855-, una de las más céntricas y transitadas de Castelló, una de las vías de entrada, o salida, hacia puntos como la Puerta del Sol, la plaza Santa Clara o la plaza de la Paz.
Ahora, si nos referimos a ella como el Carrer de la Vieta, la cosa cambia, sobre todo si nos dirigimos a vecinos de Castelló ya con cierta edad. Ese es el nombre con el que se conoce a este pequeño vial. ¿El motivo? No es otro que por esta calle transitaba La Panderola por las vías que ya no se conservan en su trazado, pero de las que quedan testimonios gráficos.
Parque del Lago
El lago más famoso para los vecinos de Castelló no está en ningún paraje natural de la provincia, sino en uno de los lugares de esparcimiento preferidos para los alumnos de los colegios públicos Censal y Carles Salvador y los vecinos del conocido como Peri-18: el Parque Geólogo José Royo Gómez, el catedrático universitario nacido en la capital de la Plana en 1895 y exiliado en Colombia, donde murió en 1961, a causa de la Guerra Civil.
En el nomenclátor popular, esta zona verde de Castelló es conocida como el Parque del Lago, y así se denomina cuando uno quiere dejar bien a las claras a qué parque concreto de la capital de la provincia se refiere. Esta denominación alternativa no da lugar a equívocos. El amplio lago, con patos y otras especies acuáticas incluidas, que alberga en su interior es su gran seña de identidad y uno de los principales motivos de visita de pequeños... y no tan pequeños.
Maestría
Hubo un tiempo en el que los jóvenes de Castelló que querían empezar a formarse en un oficio y encauzar sus estudios por la formación profesional acudían día a día al edificio de Maestría. Hoy en día, para muchos castellonenses esa denominación se mantiene plenamente vigente para referirse al Instituto de Educación Secundaria Politécnico, situado en el Parque del Oeste.
Plaça dels Caragols
Si alguien le llega a decir al doctor Gregorio Marañón, una de las figuras preeminentes de la generación literaria de 1914, que unos simples caracoles le iban a usurpar la denominación de una plaza en su honor en una capital de provincia de España, no hubiera dado crédito. Pero así ha sido en Castelló, donde las esculturas de tres moluscos realizada por Álvaro Falomir en el año 1994 ha acabado dando a conocer este punto de la capital de la Plana como la Plaça dels Caragols.
Se trata de tres caracoles en diferentes posiciones que han provocado que los castellonenses hayan cambiado el nombre a la plaza Doctor Marañón en las últimas décadas.
Plaça de l'Ereta
Los bares son los puntos de reunión preferidos por muchos castellonenses. Y algunos de ellos tienen tanta trascendencia en el día a día de sus clientes que se convierten en ubicaciones de referencia. Este sería el caso del bar L'Ereta, situado en una de las esquinas que están frente a la plaza Isabel la Católica.
Para un buen número de vecinos de la zona, en el norte de la capital de la Plana, esta coqueta plaza es conocida como la Plaça de l'Ereta, en referencia al establecimiento citado.
La Casa Gran
Posiblemente sea usted uno de los miles castellonenses que alguna vez ha necesitado atención médica de alguno de los especialistas de la sanidad pública valenciana. En ese caso, seguramente habrá sido visitante de la 'Casa Gran', el nombre popular que ha quedado inmortalizado para denominar al Centro de Especialidades Jaume I, en la calle Trullols y a las puertas de la siempre concurrida plaza Huerto Sogueros.
Dependiente del Departament de Salut Castelló, este centro sanitario abrió sus puertas en 1954 y desde entonces se convirtió en la 'Casa Gran' para los vecinos de Castelló, aunque oficialmente nunca ha tenido esa denominación; nació como Consultorio Falangista Miró y en 1986 adoptó su actual denominación.
La 'Casa Gran' también alberga las dependencias de la Dirección Territorial de la Conselleria de Sanita Universal i Salut Pública y, en la tercera planta, el Centro de Salud 9 d'Octubre.
Els Quatre Cantons
Seguro que más de una vez has escuchado, sobre todo a gente que ya pase de la cincuentena, que tal o cual comercio está situado en los alrededores de Els Quatre Cantons. Porque esa es la denominación con la que los castelloneros de soca se refieren a la confluencia de las calles Colón y Enmedio, en pleno corazón de la ciudad y uno de los epicentros comerciales históricos de Castelló.
Este nombre popular de la intersección también ha dado pie a que con él se bautice a uno de los edificios más emblemáticos que allí se encuentran. Se trata del Edifici Quatre Cantons, antiguo Edificio Hucha de la Fundació Caixa Castelló.
Avenida Palmeretes
La primera calle urbana con dos vías, una para cada sentido, que tuvo Castellón recibe el nombre de Capuchinos en recuerdo de un antiguo convento de frailes construido en 1808. Pero para vecinos de la zona y la gran mayoría de castellonenses hablamos de la avenida de les Palmeretes.
La razón de este nombre alternativo salta a la vista. Las altas palmeras que la jalonan y cuyos primeros ejemplares se plantaron a mediados de los años 20 del siglo pasado.
