Castelló reactivó el pasado mes de enero las cámaras de control de acceso al centro, una medida del consistorio que sigue generando controversia. Mediterráneo recogió el testimonio de varios afectados y representantes vecinales que lamentaban multas a vehículos autorizados y el edil de Movilidad, Jorge Ribes, resuelve algunas de sus dudas y matiza, a base de explicaciones, lo que está permitido y lo que no está permitido en el centro de la capital de la Plana.
Una de las quejas comerciales aludía a las sanciones a los repartidores que acceden al centro. En este sentido, desde el área de Movilidad del Ayuntamiento, se recuerda que el horario de carga y descarga «es el mismo desde hace muchos años» y no se ha cambiado con la instalación de las cámaras. Este horario es de 8.00 a 11.00 horas, ampliable a la franja de 15.00 a 17.00 solicitando un permiso por razones específicas que «siempre se concede».
«Se tienen que adaptar a la normativa», indica el concejal. «El centro histórico no puede estar lleno de furgonetas, no beneficia a la ciudad, entorpece el tráfico y es lo contrario a un centro peatonal», añade. Ribes indica también que ha mantenido dos reuniones con la asociación de repartidores para tratar y explicar el funcionamiento de las cámaras y cómo solicitar los permisos.
Particulares
Otra de las molestias que denuncian los vecinos es la proliferación de multas a particulares con autorización. En este sentido, el edil señala que estos permisos no son para todo el centro histórico, sino que se ciñen a la zona seleccionada. Es decir, si un vecino solicita autorización para acudir hasta su casa, su garaje o su lugar de trabajo, al recibir el visto bueno se le entrega también el itinerario que tiene permitido.
Por ejemplo si un vecino posee una plaza de aparcamiento en la calle Ruiz Vila, y solicita permiso permanente para acceder con su vehículo, se le indica al concedérselo el itinerario correspondiente. Podrá entrar al vial a través de la calle Gobernador, y salir después por la calle Mayor hasta la plaza María Agustina. El hecho de tener un permiso, señala el consistorio, no significa que pueda moverse por todo el centro. Movilidad confirma que están recibiendo multas con este tipo de casos.
En cuanto los diez minutos de plazo señalados para descargar la compra o acompañar a familiares, el consistorio señala que ese tiempo es una estimación, y que el permitido se ha ampliado y es «considerablemente mayor».
Para todo tipo de dudas, el Ayuntamiento ha lanzado la plataforma castelloconviu.castello.es. «Sabemos que los primeros meses son complicados y debe haber un tiempo de adaptación, pero es el mejor sistema y la forma correcta para fiscalizar qué coches pueden acceder o no al centro», incide Ribes, que advierte que la vigilancia llega para quedarse. «Este sistema es la antesala de la futura Zona de Bajas Emisiones» --añade- que el consistorio debe impulsar tal y como exige la Ley de Cambio Climático para ciudades de más de 50.000 habitantes.
