El proyecto de transformación del Riu Sec de Castelló en un corredor medioambiental ha dado un importante paso adelante con la aprobación, en la junta de gobierno local, de la urbanización de la Ribera del Riu Sec en la zona de Crémor.

Esta actuación, según explica el consistorio, tiene un presupuesto de 3,3 millones y corresponde a la primera fase de ejecución del plan especial, que proyecta la mejora de las conexiones en el ámbito de Crémor, así como la mejora de las riberas del río, donde se crearán zonas verdes y rutas ciclopeatonales enmarcadas en el proyecto global de recuperación y puesta en valor de este entorno.

El presupuesto estimado del total del proyecto es de 20 millones, y el consistorio pretende confinanciarlo con futuras concesiones de fondos europeos. El periodo previsto de ejecución, 2028.

Mapa del proyecto Mediterráneo

«Avanzamos en la ejecución de uno de los planes que forman parte de un proyecto tan ambicioso y clave para la ciudad como es el de poner en valor el río y su entorno como elemento vertebrador», explicó la alcaldesa de la capital de la Plana, Amparo Marco.

Las obras previstas en este proyecto de recuperación incluyen una pasarela ciclopeatonal. Además, se habilitarán zonas de estancia y de descanso, así como nuevas zonas verdes y la adecuación del entorno de la ermita de Sant Joanet del Riu.

«Este proyecto es una pieza más del engranaje que permitirá hacer del Riu Sec un corredor verde, recuperando este espacio en línea con nuestro modelo urbanístico más sostenible, inclusivo y amigable», apuntó el concejal de Urbanismo, José Luis López.  

No en vano, esta inversión de la zona de Crémor impulsa un proyecto que forma parte del plan global de la ciudad para la transformación del Riu Sec en un corredor medioambiental. Los 4,3 kilómetros de extensión que tendrá se desarrollarán entre el puente de la variante de la N-340 y la rotonda donde se inicia el cubrimiento del río en la avenida de la Vall d’Uixó.

La aprobación de este proyecto se produce un día después de la concesión de fondos europeos para crear la Zona de Bajas Emisiones en Castelló, otra actuación que sigue la senda de la sostenibilidad.